Inmensa, lujosa y atrapante. La mansión de Susana Giménez en Punta del Este dispone de absolutamente todo lo imaginable, y más. Con una extensión de terreno kilométrica, la propiedad exclusiva brilla e hipnotiza.
En ese paraíso en la tierra, la diva transita sus días desde la cuarentena más estricta, que tuvo todos los condimentos, como su salida entre gallos y medianoches a Uruguay (en vuelo privado), su accidente en las escaleras, su viaje relámpago para operarse en el sanatorio Otamendi y las declaraciones contra las decisiones del gobierno nacional.
La animadora no solo disfruta de la naturaleza, sino que también de armar contenidos para sus redes sociales, para contarle a sus millones de seguidores lo que hace día a día. En esta ocasión, Susana entendió que sería divertido exhibir un accionar con su perra Rita.
Ese canino que despertó polémicas el año pasado, cuando la diva la mandó de vuelta al criadero porque le mordía. Lo cierto es que la mascota parece que ingresó en etapa de celos y la blonda encontró un sistema para que no manche nada en la casa.
Susana creyó que sería conveniente colocarle una tanga, sí, una tanga. Le pidió ayuda a su hija Mercedes Sarrabayrouse y de esta manera filmaron toda la maniobra, que parecía una comedia de enredos.
Giménez arranca el video contando: "Rita empezó hoy con su segundo celo y le estamos poniendo una tanga, que es difícil de poner, para que no manche". Y enseguida lanzó un anuncio explosivo sobre la perra: "Ellos se van a casar dentro de unos 15 días".
En la continuidad de las imágenes, se la escucha a Susana despotricar: "Dale nena, decís que sabés pero no sabés. No me digas callate porque te arranco las mechas". Luego agrega: "Así no va, ¡no es una persona, Mercedes!".
A pesar de las dificultades, la animadora consiguió el objetivo y expresó: "No le gusta". Al unísono que su hija exclamó: "Y, no, ¿cómo le va a gustar?".