La preocupación azota a la familia de Marcelo Tinelli, dado que hace semanas que su exmujer Soledad Aquino continúa en terapia intensiva en la clínica La Trinidad. La madre de Cande y Mica ingresó con un cuadro de cirrosis hepática y a pesar del tiempo transcurrido permanece en observación y monitoreada.
El conductor de ShowMatch ofició de una especie de vocero, dado que expuso varios partes en sus redes sociales de la complejidad de su exesposa. No obstante, el animador se soltó con mayor profundidad en una charla con LAM.
En relación con la afección de Aquino, Marcelo contó: “Tiene una infección digestiva y úlcera de duodeno que se le complicó, por lo que terminó intervenida con una endoscopía y en terapia intensiva".
Tinelli soltó algunos indicios de lenta recuperación de Soledad y sostuvo: “Está internada, no digo que fuera de peligro porque sigue en terapia, pero está bien. Anoche nos estuvimos divirtiendo mucho recordando, fui con Guillermina también. También estaban Mica y Cande”.
Bajo una atmósfera más relajada, el conductor explicó ese encuentro: “Fue un momento muy gracioso porque me hago el que canto y ella me dice que no puedo cantar nada, me pega unos gastes impresionantes. Guille le da manija también”.
Fiel a su estilo de reírse de sí mismo, Marcelo agregó: “Le cantaba y nombraba a todos los cantantes que sé que no le gustan, los que para mí son los más grosos y ella me dice que son una grasada, como José Luis Perales, Julio Iglesias, Nino Bravo, hasta que llegó Coti y Sole le dijo que me enseñe cuáles son los buenos cantantes”.
Para cerrar, Tinelli realizó un repaso del cuadro de Aquino y expresó: “Está mucho mejor, acompañada por Mica y Cande. Ya se para, camina por el cuarto, quiere agarrar el teléfono. Estamos mucho más tranquilos. La primera semana fue de muchísima preocupación”.
