Bautista Mascia vivió una montaña de sentimientos en los últimos días, al coronarse campeón de Gran Hermano luego de pasar siete meses aislado con sus compañeros. Y ahora, que le toca salir a la calle, lidiar con la fama, nada es como pensaba.
La realidad del mundo exterior parece pesar a Bautista y a Nicolás Grosman, los Bro que visitaron A la Barbarossa junto con Martín Ku y Lisandro, quienes tuvieron mucho más tiempo que ellos para adaptarse a la vorágine del universo GH y la súbita fama.
¿Y cómo procesa el músico uruguayo esta nueva vida fuera del encierro? Por lo que demostraron sus gestos, con desgano, cansancio y bajón. Así se lo vio a Bautista al charlar con Georgina Barbarossa sobre estos primeros días “de civil”.
“Hacemos una vida normal, entre comillas. Los chicos (Licha y Chino) están más adaptados, nosotros con Nico estamos ahí, como buscándole el yeite…”, dijo Bauti, que por ahora está viviendo en lo de su novia Denisse y se la pasa recibiendo regalos y sorpresas de sus fans.
LA ANGUSTIA DE BAUTISTA TRAS GANAR GRAN HERMANO
Con semblante serio, el ganador de GH dijo que la vida ahora es “hermosa y re linda, pero muy distinta”. “Es un día cubierto de cosas. Te levantás muy temprano y te acostás muy tarde. Es una rueda que no para que… está buena. Es momento de trabajar, qué le vamos a hacer”, lanzó, resignado.
Sin embargo, el rubio aclaró que a pesar del agobio que siente luego de siete meses de hacer la plancha en la casa de GH, su ánimo es el mejor. “Sigo estando muy feliz, estando muy contento por lo que pasó el domingo 7… Estoy muy contento”, aseguró, antes de contar que descubrió que ya no puede ir a tomar un cafecito de incógnito.
