El Chino Maidana se ha transformado en uno de los púgiles más importantes del país, que tiene una rica historia en ese deporte. Ha logrado colgarse el cinturón de campeón walter y walter ligero de la Asociación Mundial de Boxeo, entre otras conquistas. De hecho, estuvo muy cerca de destronar a un gigante como Floyd Mayweather, no una vez, sino en dos oportunidades. No obstante, en 2016 tomó la decisión de retirarse.
Una vez que colgó los guantes, Marcos optó por disfrutar de cuestiones de la cotidianidad que la exigencia del primer nivel no le permitían. Por eso, durante varios años paseó, ha oficiado de DJ en varios eventos, relajarse en periodos vacacionales, juntarse con familia y amigos.
Toda esa soltura le condujo también a perder su figura, las tentaciones de los asados le jugaron una mala pasada y llegó a superar los 90 kilos. Algo totalmente normal, incluso lógico por tantos años de seguir rigurosas rutinas alimenticias y de entrenamientos exigentes.
No obstante, hace unos meses le picó el bichito de volver a probar el ring y se mentalizó en regresar a la actividad. Claro que para eso tuvo que someterse a dietas muy firmes y enormes sesiones de trabajo técnico y físico. Después de seguir al pie de la letra todos los pasos, el Chino consiguió retornar a un aspecto impecable, ya quedaron en el pasado ese rostro hinchadito y la pancita exagerada. Volvieron los abdominales marcados y los músculos fibrosos.
Ya atravesó la etapa dura de superar el sedentarismo, ahora sigue preparándose para volver a los principales escenarios y desafiarse a sí mismo para intentar abrazar la gloria otra vez.