El domingo por la tarde, Georgina Barbarossa tomó un vuelo desde Córdoba a Buenos Aires después de pasar unos días con su hijo y su nieta en Villa Giardino. Ella esperaba llegar temprano para descansar y arrancar bien la semana, pero todo salió mal. “El avión despegó, pero había mucha turbulencia. Después nos avisan que nos desviaban a Resistencia, Chaco. Le pregunté a la azafata y me confirmó que aterrizábamos allá”, relató.
La conductora llegó a Chaco a las 9 de la noche y encontró un caos total. “Un calor tremendo, la térmica era de 43 grados, y el aeropuerto estaba lleno porque desviaron dos vuelos de Córdoba y uno de Jujuy. Para colmo, ya no había vuelos hasta el otro día a las 6 de la mañana”, recordó. Entre recuperar valijas y consultar horarios, Barbarossa dijo que se hicieron las tres de la madrugada.
Cansada, decidió quedarse en el aeropuerto para esperar el vuelo de la mañana, pero otra sorpresa la esperaba. “Despachamos el equipaje, subimos al avión, y ahí nos avisan que el vuelo se cancelaba porque había pájaros en las turbinas”, contó indignada. Según Georgina, el calor, la falta de aire y la comida insuficiente empeoraron todo.
Ante la situación, optó por ir al hotel más cercano. “Me fui a dar una ducha porque no daba más. Me informaron que el próximo vuelo salía recién a las 6 de la tarde, así que no me quedó otra que esperar. Llegué a mi casa el lunes a la noche”, relató agotada. Barbarossa aseguró que fue uno de los peores viajes que vivió.
EL MAL MOMENTO QUE VIVIÓ GEORGINA BARBAROSSA
A pesar de su mal humor, se solidarizó con los otros pasajeros. “Había gente que viajaba para hacerse tratamientos médicos o consultas importantes. Fue un desastre, aunque entendimos que la aerolínea no tenía la culpa de lo que pasó”, comentó.
Finalmente, Barbarossa reflexionó sobre lo vivido con su característico humor. “La realidad supera la ficción. Todo lo que quería al llegar era tirarme en la cama y olvidarme de este viaje infernal. Nunca me había pasado algo así”, concluyó, todavía sorprendida por la odisea que le tocó vivir.