Para los participantes de la segunda temporada de MasterChef Celebrity existen dos días de la semana que son los peores: jueves y domingos. Y es que en los jueves, los famosos se baten a duelo para conocer quién será el único que se libre de participar en la gala de eliminación, que se lleva a cabo cada domingo.
En esta noche, los participantes comenzaron cargados de nervios, miedos y presiones, al conocer que el reto de la gala constaba en una temática íntegramente playera.
Luego de participar de un gran juego de tejo, los cocineros conocieron que el ganador de este típico divertimento de arena y mar sería el que obtuviera un pequeño beneficio para lo que sería el súper reto de la noche. El mismo consistía en preparar un plato que mediante la visual y el sabor remita al exigente jurado hacia aquellos días de adolescencia en la costa argentina, y además, presentar varios cornalitos fritos que estén obligatoriamente crujientes.
En ese contexto, fue Andrea Rincón quien logró ganar el tejo del Celebrity Beach, y su premio fue dejar de lado los cornalitos y concentrarse únicamente en su elaboración principal.
Pero al escuchar cuál fue el beneficio, la actriz no solo puso mal gesto sino que además disparó un durísimo exabrupto contra los chefs Damián Betular, Germán Martitegui y Donato De Santis, y reclamó que su deseo era liberarse por completo de la competición del jueves y automáticamente ser quien se salvara de la gala de eliminación.
"La verdad es que yo quería ir al balcón, así que que el beneficio se lo metan en el culo"
Luego de decirle a sus compañeros que tampoco “era tan bueno”, en off, Andrea apuntó: “Ok… La verdad es que yo quería el balcón, así que que el beneficio se lo metan en el culo…”
A pesar de que el selecto jurado no la escuchó, sí se acercaron a conocer cómo iban sus preparaciones y Rincón recibió algunas críticas por no estar creando una idea típica de playa que lograra conquistar el corazón de todos los argentinos que buscan algunos días de relax con el sonido del mar y un buen sabor en su boca.
¡Qué fuerte!