Ultimamente, Susana Giménez no pega una. A algunas declaraciones polémicas que la pusieron varias veces en el ojo de la tormenta, a su prolongada ausencia de la tevé, a los inconvenientes que sufrió antes de vender una de sus casas en Punta del Este y a todos los contratiempos que padeció durante su estadía en el Uruguay (primero un golpazo, luego el covid) le sumó, ahora, dos nuevos dolores de cabeza apenas llegó a Buenos Aires.
Por un lado, Susana descubrió que en la peluquería de Miguelito Romano, donde cuida su melena desde que es famosa, le robaron una de sus pelucas preferidas, que tiene un costo estimado entre 1.500 y 2.000 dólares (unos 400.000 pesos). La información la dio Mariana Brey en LAM, el caliente programa de chimentos y reportajes del que es panelista.
Según ella, Susana cometió lo que algunos podrían considerar "traición" a Miguelito Romano ya que durante el tiempo que estuvo al otro lado del charco requirió atención estética y como su peluquero de toda la vida no podía viajar por las restricciones y porque era paciente de riesgo y no tenía aplicada ninguna vacuna empezó a frecuentar a otro especialista, al que identificó como "Osvi", y al cabo de un tiempo fue tanta la confianza que ganaron que "lo habría adoptado" como su estilista definitivo.
Como corolario de un larguísimo enigmático en el que se barajaron las opciones más disparatadas, y con la presencia de Augusto Tartu Tartufoli como periodista invitado, De Brito revolvió en una bolsa de Brey y fue sacando diferentes elementos hasta que llegó a una peluca, que la periodista utiliza cada tanto. Allí informaron lo que sucedió con la diva, y después cada Angelita contó su "vínculo" con el cabello artificial.
Pero lamentablemente para la popular y querida Su, aunque sus opiniones políticas al fleje le haya valido cierto descenso en las preferencias populares, las penurias no pararon por ahí sino que continuaron cuando el equipo de producción del noticiero de Telefe se apersonó en su vivienda con la intención de acondicionarla para lograr "la realidad aumentada" con la que les dio una nota.
"Mientras movían los muebles del living, se hizo bolsa complemente una mesa de cristal de dos por dos que vale muchísimo más que la peluca. ¡Pero mucho más! Fue algo involuntario. La quisieron mover y se les rompió toda. La gente de Susana ya se comunicó con la del noticiero de Telefe para que se hagan cargo del gasto. Seguramente lo harán", informó De Brito ante la atónita y sorprendida mirada de todos quienes lo escuchaban. "Al final, esta nota es puro sufrimiento para la diva", concluyó el conductor. Y... razón no le faltaba.