En la noche del 5 de febrero, el público decidió que Julieta Poggio siga en carrera en Gran Hermano. Con más del 55 de los votos, Ariel Ansaldo perdió el mano a mano con Disney, que se mostró feliz y aliviada luego de pasar momentos de alta tensión.
Pero lo que Juli no sabe es que, mientras ella se pasa los días encerrada en la casa de Martínez, mostrando su talento para el perreo y divirtiéndose con el resto de los participantes, a su familia le tocó encarar un problemón que podría llegar a mayores: fueron víctimas del ciberdelito.
Así lo denunció la mamá de Disney, al notar que algo andaba mal con el celular de su hija. A través de la cuenta de Instagram de la bailarina, Patricia Destefani alertó a sus contactos sobre lo sucedido.
“¡Hola! Para todos los que tenían el WhatsApp de Juli, les aviso que nos robaron su cuenta telefónica y hackearon su WhatsApp”, arrancó la mujer su comunicado. Y cerró: “Bloqueen a la persona que les escriba de parte de ella, gracias”.
Pero el conflicto no quedó ahí, porque luego, en el estudio de Gran Hermano, la mamá de Juli contó lo que estaban padeciendo de parte de la persona que robó la identidad de la chica: "Nos parece que esto es un juego y que todo tiene un límite. Nos estuvo extorsionando, amedrentándonos y amenazándonos".
No es la primera vez que Destefani sale a responder por temas relacionados con la participante. Meses atrás, Patricia expresó su preocupación y angustia por las fotos íntimas que presuntamente circulaban de las chicas del reality.
A la vez, días atrás saltó a defender a Juli cuando le llovieron críticas y acusaciones sobre maltrato animal a raíz de varios comentarios de la joven que generaron repudio. “Amamos a nuestros animales”, aseguró Patricia, al mostrar sus mascotas en un video.
