Con el cabello bien rubio y las ganas de siempre, Noemí Alan habló en televisión después de mucho tiempo. Lo hizo con Marina Calabró en Confrontados, por El Nueve, y allí contó cómo se encuentra después de haber sido internada por un cuadro de depresión.
“Gracias a Dios estoy bien, por suerte. Tuve esa internación y hoy la sigo vía zoom con las terapias y los grupos. Si me hubiera agarrado la cuarentena en el estado en el que estaba no sé que habría sido de mi”, afirma la famosa Tana, que sufrió una denuncia en 2019 por maltrato de animales.
“¿Tu tratamiento tenía que ver con la depresión?”, le preguntaron. “Es una lucha continua. No es solo voluntad, sin ayuda nadie puede nada. Hay que saber pedir ayuda y hacerlo a tiempo. No bien uno empiece a verse que se queda tirado, sin gamas de hacer cosas, es un llamado de atención. Y hay que pedir ayuda”, dijo.
"La diferencia que yo veo es que en aquel momento te hacías famosa trabajando. Ahora se pelean y después trabajan", afirmó Noemí.
“Mis hijos fueron los que más me ayudaron. A Lara fue a la que llamé cuando ví que estaba mal y se vino para casa y ahora se viene con su novio a vivir conmigo. Con el tema económico estoy peleándola. Cuando terminé con Extinguidas me jubilé”, avisó.
“En algún momento tomaste distancia del medio. ¿Te arrepentís?”, fue la consulta. “No soy consciente de haberla tomado. En ningún momento decidí dejar la profesión. Si empecé a decir a muchas cosas que no, y los productores se ofenden y no te llaman más. Yo soy de la época en que estaba el barcito de Canal 9 o Telefe y te enterabas de todo. Ahora te piden hasta el grupo sanguíneo para entrar a trabajar. La cosa cambió mucho”, afirmó.
"No es solo voluntad, sin ayuda nadie puede nada. Hay que saber pedir ayuda y hacerlo a tiempo", dijo la Tana sobre su depresión.
Además la Tana contó una anécdota de su última charla para ingresar en el mundo de la tele: “Lo que me pasó una vez es que fuimos a cenar con mi ex marido y un productor. Y mi ex le preguntó: ‘¿Por qué no la llaman para trabajar habiendo tanta ficción?’ Y eñ señor dijo que para ser de hija estaba grande y de mamá no daba. ¡Y yo ya tenía dos hijos! No me ofendo que me digan vedette, pero nunca hice teatro de revista, jamás. La gente no sabe ni de lo hablar”
Y cerró: “No miro mucha tele ahora. No hay mucho para mirar y hacer con las chicas de los ‘80. No está ese tipo de programas. Ficción no hay prácticamente. La diferencia que yo veo es que en aquel momento te hacías famosa trabajando. Una vez que trabajas por ahí saltaba algún escándalete o lo provocabas. Pero ya estabas laburando. Ahora es al revés. Primero el escándalo y después el laburo. Siento que muchas chicas quieren ser famosas por el hecho de ser famosas”.