Love Is Blind se convirtió en la tendencia número 1 de la Argentina desde que aterrizó en la plataforma de Netflix. El reality de citas románticas, conducido por Wanda Nara y Darío Barassi, es un formato reconocido mundialmente pero esta es la primera vez que se hace una edición para la Argentina. Y si bien es cierto que ya reunió un enorme grupo de seguidores, también es cierto que reúne varios detractores.
Cuando aparecen series que son furor o tendencia, esas que rápidamente se convierten en un éxito total, es normal que varios busquen subirse a la ola para ver de qué tratan. Pasó con ficciones icónicas -La casa de papel, Merlina, Stranger Things, Peaky Blinders y más- y también con realities como Love Is Blind. Pero a veces no convence a todos, y de hecho Diego Leuco explicó su enorme decepción al ver este formato dirigido por Wanda.
“Ayer vi Love is Blind”, lanzó Leuco en un momento de Antes que nadie, el ciclo de streaming que tiene en LUZU TV todas las mañanas. Si bien dos de sus compañeras le festejaron dar este paso -Mica Vázquez y Yoyi Francella-, el balance de la experiencia del periodista al mirar los primeros capítulos del show fue bastante negativo.
“Vi el primer capítulo entero. Me quise martillar los huevos desde que empezó hasta que terminó. Vi todo el chamullo este del sueño con Emily, vi a cuatro personas enamorarse en tres días, cosa que no… ahora me gusta menos que antes que verlo”, disparó Diego, para luego dirigirse a sus compañeras y hacerles un reclamo lleno de humor.
LA INDIGNACIÓN TOTAL DE DIEGO LEUCO CON LOVE IS BLIND
“Todo el tiempo pensaba en ustedes. Decía ‘¿Qué les pasa en la cabeza? ¿Cuál es el disfrute de esto?’. O sea, no lo juzgo porque son gustos. No le creí a ningún participante, no le creí la dinámica… igual después se pone más fácil de ver”, siguió, a lo que Yoyi le respondió: “El primer capítulo es una película de Tarantino”.
Pero Leuco siguió tirándole bombazos al programa conducido por Wanda: “Al tercer día le dice ‘sos el amor de mi vida, te amo’, lloraban… al cuarto día de conocerse lloraban a mares y se decían que el sueño de sus vidas es casarse con la otra persona. ¿Qué dicen? ¡La conoció cuatro días, diez minutos por día… son 40 minutos, y el tipo está llorando diciéndole que es el amor de su vida!”.
