El regreso de Diego Maradona como director técnico, tras 6 meses de inactividad, en el partido que disputaron Gimnasia y Esgrima de La Plata ante San Lorenzo tuvo como dato saliente la presencia de Verónica Ojeda y Dieguito Fernando, el hijo que tuvieron juntos, en el Nuevo Gasómetro.
Las imágenes del ídolo con su expareja y su hijo menor tuvieron gran repercusión y si bien algunos destacaron lo saludable que se lo vió dirigiendo al equipo, su hija, Gianinna, se sintió muy ofendida por la compañía que su padre eligió para su reaparición y lo manifestó en sus redes sociales.
“Un día te volvió, y no aprendiste. Elegiste seguir lastimando. El de arriba lo sabe... ¡y yo también!”, escribió la joven en sus historias de Instagram en clara referencia a su padre, aunque sin mencionarlo de manera explícita.
La rivalidad entre Gianinna y Verónica viene de larga data y reflotó a comienzos de año cuando se filtró el video Diego bailando con Ojeda en estado de ebriedad y con los pantalones bajos. “Si me daban a elegir nunca hubiese querido que mi hijo vea así a su abuelo”, declaró y responsabilizó al entorno de su padre, Verónica incluida, por lo sucedido.
Por su parte, Ojeda también dejó en claro que su relación con Gianinna era mala cuando en una entrevista con Confrontados para explicar su participación en ese polémico video, lanzó: “No voy a hablar de la hermanita de mi hijo”.
Mientras mantiene la disputa legal con Claudia Villafañe, la madre de Dalma y Gianinna, en su reciente aparición pública, Diego dejó en claro que no tiene interés en retomar relaciones con esa rama de su familia.
