Hay problemas y problemas. Claro que toda contrariedad es respetable, pero algunas engloban una menor complejidad. Amalia Granata transita por una dificultad en el ámbito familiar, una situación que la tiene preocupada.
Resulta que Marcelo Polino deschavó a su compañera de radio con una problemática que la aqueja en la dinámica hogareña, una circunstancia peculiar que se relaciona con su vínculo con el personal doméstico.
El conductor de Radio Mitre evitó lo protocolar y mandó al frente a la diputada provincial: “Ella tiene dos problemas: uno con los colegios y el otro con las mucamas. A ella la abandonan las mucamas muy rápido. Incluso cuando tiene que venir acá, toca timbre en la casa de los vecinos para ver si le pueden cuidar a los chicos. No sé, se le van, Tiene como un karma con eso”.
Lejos de evitar el tema o intentar minimizar la cuestión, Granata se lanzó a describir el contratiempo y narró: “No sé por qué pasa eso, yo soy demasiado tranquila y les doy la mano y me agarran el brazo”.
Luego, Amalia focalizó en una supuesta falta de compromiso de las empleadas y exclamó: “Lo que pasa es que hay que trabajar y no todo el mundo tiene ganas de hacerlo, parece que las que me tocan a mí, no tienen”.
Ya en el cierre de su explicación, Granata comentó que todo esto le origina serias dificultades, por eso bramó: “Yo necesito alguien que me ayude, salgo a laburar, no es que estoy tirada tomando sol y quiero que me alcancen un trago ¡Necesito ayuda!”.