Si 2020 fue un año difícil, 2021 fue como una montaña rusa para Jorge Rial, que después de renunciar a Intrusos después de veinte años en pantalla, arrancó TV Nostra, un nuevo proyecto al que le puso muchísima expectativa.
Pero si el programa de América empezó como una bomba con la entrevista exclusiva a Matías Morla, con los días se fue desinflando hasta arañar el subsuelo del rating, cuestión que llevó a Rial a tirar una segunda bomba pero, esta vez, una de humo.
“Me dieron una Ferrari y la choqué”, dijo un compungido Jorge el viernes pasado, cuando sorpresivamente anunció que renunciaba al programa, dejando sin trabajo a sus panelistas, Marina Calabró, Ángela Lerena y Diego Ramos (amén de productores, camarógrafos y demás, claro).
La noticia cayó muy mal en los medios y desde todos lados salieron a cuestionarle esta decisión. También, quienes se pusieron el programa al hombro en todo momento y se enteraron de que el ciclo había llegado a su fin apenas antes de salir al aire: Calabró y Ramos, que estallaron furiosos contra Rial. Que no la batalló, que no los tuvieron en cuenta en la toma de decisión, que manejó mal la situación… Fue lo mínimo que se dijo.
¿Y cómo se tomó el ex Intrusos esta lluvia de críticas? Refugiándose en su hogar, con los suyos. Con música, aguante familiar de su esposa y de su hija Rocío y unos ricos sandwichitos de carne a la parrilla.
Así lo dejó ver en sus redes en las últimas horas, al compartir una foto que subió Romina Pereiro en el living de su casa junto a su marido y una de sus hijas, con la canción “All you need is love” de Los Beatles de fondo, un corazón y la frase: “Bancamos a full”.
“¡Hoy salen sanguchitos a la parrilla!”, expresó luego Jorge al publicar la mise en place de la comilona, a pura cumbia, relax y buena onda. Mientras tanto, Troya sigue en llamas...