Boca en la Copa Argentina, La Natividad en el Campeoato Abierto de Polo de Palermo, CUBA en el torneo de la URBA y Noelia Marzol en La Academia de Showmatch. Los campeones de la semana pasada siguen de fiesta. Pero en medio de las celebraciones por haberse consagrado como la mejor en la pista de Marcelo Tinelli, la flamante mamá no pudo contener el llanto al recordar el poco apoyo que recibió de su papá cuando era una niña y sintió el "llamado de la pasión" para ser bailarina.
En una especie de raid televisivo que siempre le siguen a este tipo de logros, Marzol visitó el piso de Los Angeles de La Mañana junto a su pretendido compañero Jhony Lazarte, vinculado durante mucho tiempo con Jimena Barón, quien finalmente lo acusó -como también le dijo Yanina Latorre- de "calentar la pava pero no tomar los mates", una frase popular que se usa para definir a aquellos que coquetean eternamente pero nunca concretan.
También estaba Celeste Muriega, quien llegó hasta las semifinales y allí fue derrotada por la pareja que luego se impondría 50,7 a 49,3 sobre los novios Cachete Sierra y Fiorella Jiménez en el choque por el título. Un rato después de que Marzol contara que para ella fue todo un acontecimiento que su papá la acompañara al estudio porque es un hombre que prefiere esquivar la exposición pública, Muriega le pidió que hablara de su infancia y del escaso respaldo que recibió su deseo de dedicarse a las danzas.
"Fue duro. Fue difícil. Mi papá quería que siguiera una carrera universitaria. Me mandaron a colegio inglés, tenía medalla de oro por las notas, me habían dado una beca, pero yo sentía lo artístico. Me faltó apoyo".
"Quiero decir, para que no se mal entienda y no lo demonicen, que mi papá es el mejor y que lo amo, es una gran persona", aclaró Marzol de entrada nomás. Pero enseguida se quebró y con la voz balbuceante y el pulso acelerado recordó que "es verdad, cuando era chica tuve poco apoyo y eso no está bueno. Fue difícil, y la que me apoyó siempre, me bancó y me mandó a las academias fue mi mamá".
"Yo tenía notas espectaculares, medalla de oro, me mandaron a un colegio inglés, era la nena y querían que siguiera una carrera unviersitaria. Y no está mal, pero yo quería ser bailarina, artista, y sinceramente no había mucha comprensión sobre eso. Yo tengo 35 años, pasó hace mucho tiempo y también tuve que esperar muchísimo, porque el reconocimiento no me llegó enseguida", dijo Noelia, quien esta en pareja y tiene un hijo con el futbolista Ramiro Arias, quien actualmente juega en Quilmes.
Precisamente con ese deporte, el más popular en el mundo, comparó Noelia lo que sentía ella de pequeña. "Esto es como explicar lo que sienten los fubolistas cuando tienen ganas de jugar. Es imposible ponerlo o explicarlo con palabras. A los 4 años, a mi me llevaron a natación, porque querían que aprendiera a nadar para que no me ahogara. Esas cosas que tienen los padres. Y cuando nos íbamos, que ya me habían anotado, pasamos por un lugar donde hacían gimnasia rítmica. Me quedé pegada un montón de tiempo y mi mamá me preguntó "¿Querés hacer esto?" yo yo le respondí "¡Sí!". Pero a mi papá le costó mucho entenderme", finalizó.