Además de viralizar opiniones, fotos y comentarios que poco suman, los famosos, influencers y estrellas de Twitter tienen un gran poder en la punta de sus dedos: el de lograr mover miles de voluntades en favor de una buena causa o de una necesidad en particular, con un solo click.
Y así como Santi Maratea juntó millones de pesos para pagar un medicamento carísimo para una beba o comprar camionetas para la comunidad wichi, ahora fue la China Suárez, e infinidad de usuarios de la red del pajarito, obvio, quienes podrían torcer el destino de un hombre y su familia.
“Corto pasto, limpio canaletas, pinto, etc. Me pagan lo que puedan. Cualquier ayuda me sirve”, rezaba el volante que Carlos Colombo pegó en los alrededores de su casa de Parque Castelli, en La Plata, desesperado por conseguir trabajo, en medio de la malaria en la que quedó tras la pandemia.
Pero Carlos tuvo un ángel aparte, porque inesperadamente una usuaria lo ayudó publicando su pedido en la red social, el mensaje terminó llegando al celu de la China Suárez y ella, que tiene casi 4 millones de seguidores, lo retuiteó, colaborando con la causa.
“No imaginamos que iba a pasar esto. Yo puse una necesidad y que lo hayan visto… se agradece mucho”, dijo Carlos a La Nación, emocionado porque el mensaje compartido inicialmente por aquella chica y viralizado por La China llevó a que el líder de una banda musical organizara una colecta para comprarle una herramienta de trabajo.
Carlos tiene 55 años y contó que vive de hacer todo tipo de changas y arreglos: pinta, corta el pasto y limpia tanques. “Yo hago changuitas, no pongo precio o valor porque todo el mundo está pasando una situación difícil”, indicó el hombre, que vive junto con su esposa Gladys, que es repostera, y su hijo Valentín, de 16.
“Tengo un nene con síndrome de Down, operado del corazón, que usa plantillas ortopédicas y lentes recetados. Cobra una pensión de 1200 pesos por discapacidad, este año tuvimos que sacarle a la maestra de apoyo y a la fonoaudióloga. Vivimos para él”, comentó el platense.
“Agradecele a la China Suárez y a todos los que lo viralizaron. Para uno, que lo hayan compartido es una satisfacción”, le comentó el trabajador a la periodista del diario que le hizo la nota, sorprendido del alcance que tuvo su pedido desesperado y a la espera de conseguir una estabilidad económica desde este volantazo del destino a su favor.
