El Pepo se encuentra actualmente en la comodidad de su hogar pero cumpliendo con la prisión domiciliaria que le impuso el juez Mariano Cazeaux. Además, el músico aún continúa acusado de doble homicidio culposo luego del trágico accidente que terminó con la vida de dos colaboradores de él.
Cabe recordar que en la madrugada del 20 de julio del 2019, el cantante tropical chocó y volcó su vehículo cerca de la localidad de Dolores y provocó la muerte de su representante Ignacio Abosaleh y del trompetista Nicolás Carabajal.
A pesar de que El Pepo fue detenido en el penal de Melchor Romero, jugando al fútbol dentro del recinto se fracturó el peroné y además de ser intervenido quirúrgicamente logró obtener la prisión domiciliaria por “dolencia médica” y, además, porque dentro de la celda no contaba con los elementos necesarios para su rehabilitación.
SU PALABRA
Sin embargo, el músico decidió romper el silencio y le brindó una extensa entrevista a Luis Ventura para su programa Secretos Verdaderos, en donde además de contar su situación actual, reveló sus pensamientos más oscuros, como que en algún momento consideró la opción del suicidio.
“Josefina (su esposa) es la que me empuja para que salga adelante. Hace tres años que estamos en esta casa. Vivíamos a quince cuadras, teníamos intención de comprar una y salíamos a ver casas de noche, le sacábamos fotos y después llamábamos a la inmobiliaria. Vimos ésta y le pregunté si la había visto. Pegamos la vuelta y dijimos es ésta" explicó el músico sobre el hogar en donde además de habitar, cumple su condena acompañado también por su hijo Ian.
No obstante, en la fecha que ocurrió el accidente, el músico y su esposa estaban distanciados y viviendo en hogares separados. Recordando aquel duro momento, El Pepo apuntó: “Vivíamos en casas separadas pero nunca dejamos de vernos, de estar. Siempre tratando de recomponer. Al momento del accidente estábamos retomando la relación”.
Su separación con Josefina se debió principalmente a su recaída en las drogas: “Me había ido porque fue por una cuestión de que yo no estaba bien y como acá vive Ian también no tienen por qué pasar por ciertas cosas que no son buenas para un pibe de 16 años. Entonces, me fui a vivir a otro lado“.
Y recapacitando sobre su problema de adicción, El Pepo se sinceró: “Primero que todo soy consciente de que tengo una enfermedad, la sigo teniendo. Lo que me pasó el 20 de julio, junto a la muerte de mi viejo, fue la trompada más dura que me dio la vida. Y yo cuando falleció mi viejo estaba bien, estaba limpio, no tenía el problema que tenía como cuando pasó esto”.