La nueva temporada de Bake Off Argentina está cada vez más intensa para los participantes que buscan conquistar el paladar el exigente jurado y se sumergen en complicadas preparaciones con el fin de consagrarse como los mejores pasteleros de cada noche.
Asimismo, en el comienzo de la tercera semana, los concursantes iniciaron con el pie izquierdo y muchos de ellos se llevaron el enojo de Damián Betular, Pamela Villar y Dolli Irigoyen, que los obligaron a mejorar sus rendimientos si no quieren quedar fuera del reality y, por ende, de la carpa de cocina.
En la gala del miércoles, la conductora Paula Chaves reveló la difícil consigna de la noche que constaba en preparar un menú de cuatro pasos pensado para disfrutar en una sala de cine, en donde las cosas que debían presentar eran: pochoclos saborizados, golosinas, una preparación dulce y otra salada a elección de cada uno.
Sin embargo, a pesar de que muchos pasteleros remarcaron que era un reto divertido, los errores, los contratiempos y las malas organizaciones comenzaron a surgir en cada mesada de cocina y luego de que los jurados pasaran por sus estaciones, también comenzaron a aparecer los roces en el certamen.
¿Qué pasó? Que Betular quiso indagar cuál era el menú pensado por Gino Minnucci, uno de los personajes más polémicos del reality, y entre los dos iniciaron un intenso cruce de palabras que sorprendió a todos los presentes.
Todo comenzó cuando Damián comenzó a los gritos indicándole que su mesa estaba totalmente desorganizada y que estaba utilizando mal los elementos de la cocina, por lo que Gino disparó sin filtro: “Ya viene Betular a buscarle el pelo al huevo”.
"Ya viene Betular a buscarle el pelo al huevo"
No obstante, le admitió que él “tenía razón” y que estaba llevando adelante sus preparaciones de una manera desprolija, pero filoso, el jurado estrella le apuntó: “Sí, siempre tengo la razón”.
Para suavizar la situación, el participante bromeó con los signos de cada uno y entre risas le preguntó: “Ah, sos de los míos. ¿Sos de Libra vos también?”. Pero lejos de ser ameno y calmar las aguas, Damián retrucó: “Sí, pero no me identificó con vos eh”.
¡Picante!
