Un me gusta de Twitter es una especie de "Dale", aquel grito que le salía de las entrañas a Mariano Iúdica cuando conducía, hace unos años, las primeras versiones del "Cantando por un sueño", llamado en ese entonces "Soñando por cantar".
"Ahora va a interpretar el tema de Valeria Lynch. Daaaaaaale" exclamaba Iúdica en un alarido que se les volvió marca registrada tanto a él como al ciclo. El realitie regresó ayer, conducido por la dupla Angel de Brito - Laurita Fernández, pero el "me gusta" del actual líder de Polémica en el Bar sonó más a "cómo le dio" que a "dale".
Sebastián Tempone, uno de los productores estrella de América y quien supo trabajar mucho tiempo con Iúdica, ensayó en su cuenta una especie de reivindicación para la estrategia del canal del que forma parte.
"Veo que muchos saludan y celebran por la llegada de un programa y parece que se olvidan que una empresa como América apuesta todo y sale en vivo 17 horas por día" escribió Tempone, tan conocido por su laburo atrás de cámaras como por su fanatismo por Gimnasia y Esgrima de La Plata, el club que dirige Diego Armando Maradona.
La publicación cosechó 116 "me gustas". Uno de ellos fue el de Iúdica, quien con apretar un simple botoncito "mató dos pájaros de un tiro". Por un lado, quedó bien con su canal. Por el otro, volvió a marcar una diferencia con Marcelo Tinelli, propietario de LaFlia y quien, a distancia, mueve los piolines del Cantando.
Iúdica era uno de los laderos de Tinelli en Ideas del Sur y conducía los "programas satélites" del Bailando por un sueño al que Marcelo le pone la cara y el cuerpo desde hace una punta de años. Pero un día quiso crecer, y no le quedó otra que correrse del ala protectora de Tinelli y salir de su "zona de confort".
Tras un período alejado de la actividad, Iúdica desembarcó en América, donde se convirtió en uno de los conductores más importantes. Primero en Involucrados, y después en Polémica. Hasta el año pasado, tuvo a cargo los dos ciclos. Desde 2020 sólo está a la noche.
Esa circunstancia, quizás, le aporte más tiempo para ver otros programas, repasar las redes y estar atento a lo que se dice y a lo que se escribe. Y de paso, cañazo: con la sencillez de un "me gusta" puede sentar una postura. ¿Querés decir algo? Daaaaaale....