El Polaco y sus historias de amor siempre brotan al tapete público. A lo largo de los años ha protagonizado diversas relaciones con muchos vaivenes y una extrema cobertura de esos dimes y diretes.
En las últimas semanas, el cantante volvió a construir un reality de su vida privada con las declaraciones fortísimas sobre Barby Silenzi, al punto que bramó en cámara que se habían separado y que no existía posibilidad de reconciliación.
Claro que a los días, El Polaco confirmó la vuelta del amor con diversos posteos en conjunto con la mamá de Alma, su hija más pequeña. Una contradicción tras otra, pero que se enrola en las dificultades actuales de las relaciones interpersonales.
Ahora, el músico sorprendió con una confesión impresionante, que refiere a la particular decisión que ha ejecutado a lo largo de su vida respecto a sus parejas. En la visita a la mesa de Mirtha Legrand, Ezequiel contó que tiene tatuados los nombres de todas las mujeres que lo enamoraron.
Ante la pregunta de Juana Viale, El Polaco se lanzó a detallar: “Tengo un montón de tatuajes. Tengo uno en la pelvis que es la inicial de mi novia (Silenzi). En el cuerpo me hago las cosas que son importantes en mi vida”.
Así surgió a la luz la extraña determinación del cantante y sobre todo la exigencia que le estaría impulsando Barby. ¿Qué pasó? El ex MasterChef contó que se diseñó el nombre de todas sus exnovias: “Sí tengo el de todas y los dejo. Te piden que me las saque, pero no me los saco. Si me tatuo es porque son las mamás de mis hijas. Fueron importantes en mi vida y vamos a ser familia para siempre”.