Otro capítulo más. Otra batalla pública entre Luciana Salazar y Martín Redrado, quienes hace años iniciaron una guerra interminable, con todo tipo de acusaciones y sobre todo con la implementación de demandas judiciales para dirimir sus diferencias.
En los últimos meses, y el economista se sumergieron en una mediación que no terminó de manera clara. Pero lo más álgido se produjo recientemente porque la blonda saltó a sus redes sociales para compartir una denuncia tremenda contra Martín.
La mediática decidió contar que le llegó una notificación sensible de Estados Unidos, por la cual le informaron que Redrado quitó su tarjeta de crédito del banco de óvulos. Sí, la rubia deberá acudir a abonar de su propio bolsillo el resguardo de sus genes para intentar tener un hermano para Matilda.
Una queja que despertó el análisis sobre cuáles serían los motivos que obligarían al político a pagar, en dólares, la mantención de ese resabio genético de la modelo. Y así llegó la fuerte definición de Mariana Brey, que asestó con vehemencia su pensamiento: “Que trabaje y pague ella”.
Claro que no se imaginó la panelista que Luli llamaría al ciclo radial de Marcelo Polino para confrontarla. Así se produjo un intercambio muy caliente. Brey disparó: “Él puede prometerte algo y pueden pasar diez años y puede cambiar de idea”.
Así estalló en ira la rubia: “No, Mariana, el matrimonio es un contrato. Uno no puede cambiar lo que acuerda…”. Hasta que la periodista utilizó la gran incógnita de todo el mundo: “Pero vos nunca te casaste con él. Tampoco es el padre de tu hija”.
Luciana no pudo contener su indignación y trató de explicar su posición: "Si vos no sabés la interna, cómo sabés qué responsabilidades tomó él con mi hija, como para hablar así, y decir: 'Che, que trabaje'.No me vengan a decir que la mujer solo tiene derechos cuando está casada”.
En esa discusión álgida, llena de recriminaciones, Mariana profundizó: ”Si no hay un papel firmado, que lo comprometa a él de por vida, si no lo quiere hacer, no lo va a hacer. Si para vos es importante. Trabajás y lo pagás. Es sencillo”.
Sin detallar con argumentos los motivos que empujarían a Redrado a solventar ese tratamiento personal, Salazar cerró: “Vos siempre salís con lo mismo, con mi tema. Y no es así. Él tiene la responsabilidad. Lo tiene que hacer. Sacá tus propias conclusiones”.