En 2016, la familia Messi se agrandó con la llegada de Hulk, un hermoso perro de la raza Dogo de Burdeos que Antonela Roccuzzo le regaló a su marido y que pronto se adaptó a la dinámica de la casa del actual jugador del PSG.
“Nuevo integrante de mi familia. Gracias amor, por este regalo hermoso”, expresó Lio en su cuenta de Instagram cuando el perrito apareció en su vida con su alegría y nobleza. Con el correr del tiempo, Hulk fue ocupando un lugar protagónico en los posteos de la pareja.
Es que el animal no sólo es muy cariñoso y leal, sino que su particularidad más singular es su enorme tamaño, que contrasta de manera muy graciosa con las dimensiones mini de Abú, el Caniche Toy que también vive con ellos y es tan mimado como él.
Y a pesar de que el hermoso dogo color caramelo ya tiene seis años, aún tiene gestos de cachorro. Así lo hizo ver Antonela al compartir en sus historias de Instagram una de las últimas fotos que se sacó junto a su compañero canino en la que el animal aparece despatarrado, con la cabeza sobre el regazo de la rosarina.
Además de ser súper tierna, lo que llama la atención en la postal cotidiana que resume el amor del perro hacia su ama es el cuerpazo de Hulk, que al lado de Anto parece todavía más gigante de lo que es.
Cabe recordar que los perros de Lionel Messi y Antonela Roccuzzo generaron preocupación en 2021 al producirse el pase del futbolista al club francés. Es que la familia, mientras buscaba casa en París y organizaba la mudanza, debió dejar a los canes en Barcelona, antes de disfrutar del más emocionante de los reencuentros.