No fue un "desayuno" muy agradable el que mantuvieron Luisa Albinoni y Delfina Wagner, novia de Alfa y precandidata a parlamentaria de la Ciudad de Buenos Aires por los movimientos libertarios, precisamente en lo de Pamela David, donde la actriz es panelista y la muchacha estaba siendo reporteada desde un zoom. En un momento cruzaron opiniones, elevaron el tono, empezaron a decirse de todo... y de la nada explotaron.
Hubo gritos, acusaciones, miradas torvas y agresiones. Todo empezó, minutos antes, cuando uno de los temas centrales del programa era la enorme movilización de los movimientos sociales que colapsaron el centro de la Ciudad de Buenos Aires. La gente que debía transitar por allí "hervía de la bronca" y se manifestaba en contra de la marcha -y de los piquetes- de las maneras más agresivas.
Delfina, que tiene 20 años y hace poco fue captada discutiendo con Alfa, dijo que la solución a los conflictos callejeros es la represión. Sí, la represión lisa y llana. La represión, una palabra que genera escozor en varias generaciones de argentinos por la sangrienta y dolorosa experiencia de los años 70 pero que parece haber reverdecido en un sector de los jóvenes que están "podridos" -según lo expresado por ellos mismos- de algunas situaciones con las que deben lidiar a diario: inseguridad, piquetes, marchas, movilizaciones.
Frente a semejante declaración, Luisa Albinoni, que cruzó la barrera de los 70 y sufrió en carne propia esa época tan violenta, la cruzó fuerte. "Desde mi generación, que he vivido la dictadura y la represión, y dejame hablar, si no es un monólogo tuyo, esuchame y permitime terminar, cómo vas a decir eso cuando la gente está sufriendo y en esa marcha hay madres y niños. La situación de nuestro país es muy delicada. Hablamos de hambre. Que se delinque por hambre o por drogas. ¿Entonces cómo vas a hacer para solucionar eso? ¿Cuál es tu idea? ¿Profundizar otra grieta o hacer una nueva? Aclarámelo porque me da miedo escucharte", le tiró.
TREMENDA PELEA DE LUISA ALBINONI Y DELFINA WAGNER, LA NOVIA DE ALFA, EN DESAYUNO AMERICANO
"No se por qué tiene miedo. Cuando la gente de bien ve un policía siente tranquilidad, no otra cosa" alcanzó a contestar "Delfi" antes de que Luisa estalle. "Yo viví la dictadura, amor, estás hablando de represión" la cortó. "Somos una nueva generación. Con los hijos y los nietos de los montoneros y los guerrilleros no queremos saber más nada. No tenemos más nada que ver con ustedes, que superó el pasado, que no reivindica a la dictadura ni la desaparición de personas pero que tampoco nos vamos a olvidar de la otra cara que fueron los delitos que cometieron las organizaciones guerrilleras, muchas de las cuales están siendo reivindicadas por estos piqueteros con remeras con la cara del Che Guevara, con los logos del ERP o símbolos comunistas, reivindican lo peor de los genocidios de la humanidad. Asi que no me venga con ese cuento. Los únicos que siguen con eso son los que siguen cobrando subsidios en base a la dictadura" le retrucó Delfina, muy envalentonada y muy aguerrida.
Entonces, Luisa no aguantó más y reventó como cuando miró a cámara y dijo "tengo las bolas llenas". "¡Perdoname, perdoname, corazón.... Yo no inventé nada y me he roto el culo trabajando por este país y no te voy a permitir lo que estás diciendo. La nueva generación todavía tiene que demostrar que sirve. ¡No me faltes el respeto, carajo! La nueva generación tiene que demostrar que sirve, porque ya vimos muchas cosas. Nosotros los viejos también estamos podridos de las cosas de antes. Con todo respeto, te puedo dar la mamadera en esto, pero no decís un carajo de lo que vas a hacer".