Con algunas ampollas en los pies y los gemelos pidiendo aún un poco de descanso, Pampita dejó de caminar pero tuvo "al trote" a toda la prensa. Después de peregrinar a la Basílica de Luján en compañía de su amiga Barby Franco, hizo "correr de acá para allá" a un nutrido grupo de periodistas ávidos de contar con su palabra luego de concretar semejante trayecto. Paparazzi se puso primero en la fila de largada y obtuvo su palabra en exclusiva.
Con su hija Anita en brazos (¡Está cada vez más bonita!) y su marido Roberto García Moritán llevando el carrito de bebé en el que trasladan a la nena (no emitiremos opinión acerca de él, pero hay que reconocer que está siempre elegante), Pampita llegó radiante a su lugar de trabajo. Por más que le dolieran las plantas de los pies y su cuerpo le pidiera a gritos que se relajara, ella siempre está genial.
Lucía un vestido blanco con algunas incrustaciones en colores pasteles, desoyendo los consejos de los meterólogos que avisaban de una mañana fresca y ventosa. Si Moritán estaba con buzito de mangas largas y camperita de jean encima, ella estaba lo más bien enfundada en ese pedacito de tela. Quizás para confirmar lo que dicen de su figura, de su estampa y de su personalidad: que es un sol y que siempre brilla. Además, nada de calzado cómodo. Xapatos con tacos y a otra cosa mariposa.
Así la encontró Paparazzi, que le preguntó el verdadero motivo de su visita a la Virgen. Si era verdad que se trató de cumnplir una promesa que le había hecho. "En realidad -aclaró Pampita- fui a agradecer por las cosas buenas que no están pasando, y la protección que tiene mi familia".
En ese sentido, Pampita agregó que durante toda la jornada del sábado sintió "mucha emoción y mucho agradecimiento", y si bien reconoció que el camino "es muy largo y de muchas horas" remarcó que "durante el camino uno va transitando todas las emociones y todas las sensaciones". Sin perder la sonrisa, consideró que "el momento final es muy fuerte".
"Fui para agradecer las cosas buenas que nos están pasando, y la protección que tiene mi familia", contó Pampita ante la cámara de Paparazzi.
Pampita y Barby Franco llegaron hasta la Iglesia de Luján tras una caminata de aproximadamente 9 horas. En un video que grabaron en ese momento no pudieron contener las lágrimas. el viaje fue prácticamente transmitido en vivo desde sus redes sociales, donde miles de personas les dieron aliento para continuar, sobre todo en los momentos de flaqueza. Ahora se sabe para qué fue.
IMAGEN Y NOTA: ALEJANDRO CARRA