Recién recuperado del Covid 19, que incluso lo llevó a estar internado un par de días, Diego Brancatelli "reapareció" con todo en el mundo de los medios. No volvió aún a la tele, pero abrió las puertas de sus redes sociales y coló algunas opiniones muy "fieles a su estilo". En la más llamativa, se burló de Eduardo Feinmann después de que el periodista pidiera disculpas por "pifiar" con una foto.
Aclaremos, por si hace falta: Brancatelli y Feinmann están parados a los dos lados de la famosa "grieta" que separa a gran parte del periodismo político y a una porción significativa de la sociedad argentina. Las opiniones de Brancatelli son favorables a la gestión que encabeza Alberto Fernández, y las de Feinmann todo lo contrario.
En su espacio en La Nación +, un canal al que llegó hace un puñado de meses y que ya ayudó a poner en el podio de las emisoras de cable, Feinmann calificó de "indignante" una foto en la que se veía al presidente sin barbijo ni distancia sonriendo junto a pilotos y comandantes de un avión. Alberto Fernández se encuentra de gira por algunos países de Europa, y el periodista dijo que la imagen correspondía al vuelo de ida. Sus palabras fueron acompañas por los gestos desaprobatorios del doctor Claudio Zin, su columnista.
Pero no. Después del programa le hicieron notar a Feinmann que la foto no correspondía a este viaje sino a otro que Alberto realizó poco después de asumir la primera magistratura y poco antes de que se declarara la pandemia de coronavirus. En ese momento, los barbijos y la distancia social no formaban parte de "ningún protocolo" sanitario ni de viaje.
Feinmann no se escondió. En su cuenta de Twitter reconoció el error y pidió disculpas. Hasta ahí, nada del otro mundo. Desde ahí en adelante, el "efecto grieta". Muchos (la mayoría anónimos, pero también algunos conocidos) le refregaron "la pifiada" en la cara.
Uno de ellos fue Brancatelli, quien aprovechó la ocasión para ponerle un apodo bastante burlón: "Feikman" le puso. Una "fake", volvamos a aclarar, es una "noticia falsa" en el vocabulario que se impuso en estos tiempos modernos.
Uno el año pasado y otro hace un puñado de días, Feinmann y Brancatelli la pasaron mal con el Covid 19. Los dos estuvieron internados pero lograron superar el trance y volvieron a sus hogares. Eso y su condición de periodistas son, parece, sus únicos puntos en común.