Alejandro Fantino se muestra muy honesto, con repentización al aire. Se mueve como pez en el agua delante de las cámaras y con su capacidad de verba suele entregar momentos divertidos en su ciclo de América.
Más allá de recorrer temas de actualidad con mucha seriedad, el santafesino posee una habilidad para construir historias y ponderar detalles que otros dejan pasar por alto. Por caso, en la edición del viernes se detuvo un tiempo extenso en las vicisitudes del doctor Kambourian, que narró con mucha emotividad las situaciones dolorosas que transitan los médicos, las vivencias difíciles que afrontan.
Así como Alejandro se sumerge en esas profundidades, también construye momentos divertidos. De esta manera logró compartir una infidencia, una circunstancia de su vida privada, la que transita con su novia Conie Mosqueira, con quien sale desde el 2018.
Un tatuaje me está complicando con Coni
En el contexto de hablar sobre tatuajes, el animador soltó, tal vez sin pensar en las repercusiones, que tiene un contratiempo. “Yo estoy tatuado, tengo muchos. Y hay uno que es un gran problema, que me está complicando con Coni”, en referencia al nombre de Miriam que está en su antebrazo.
Marcela Tauro intervino y le espetó: “Tu mujer actual es una santa. ¿No podés hacer nada con eso? ¿A vos te gustaría que tu novia tuviera un tatuaje así?”.
Mientras que Alejandro intentó explicar su postura: “¿Qué querés que haga? Es una parte de mi vida. Está todo bien con Miriam, tengo una buena relación. Igual me tengo que terminar la manga y ahí se tapa”.
Le propuse casamiento y ella me dijo ‘no por ahora’
Además de revelar esa confesión, Fantino fue un paso más allá y también describió que ya le pidió casamiento a su novia. “Reboté tres veces con Coni, le dije si le gustaría, si estaría bueno casarse. Y ella me dijo ‘no por ahora’. Me dio a entender que debe ser la propuesta de una manera más romántica, y a mi no me salen esas cosas”.
Una charla normal del programa derivó en dos situaciones de la intimidad, por un lado que su pareja actual no le agrada el tatuaje de Lanzoni, y sobre todo que el conductor le insinuó en tres oportunidades la posibilidad de pasar por el altar y recibió un no.
