Quizás Fátima Flórez no lo sepa, pero el 29 de abril se celebra el día del animal como una forma de recordar el fallecimiento de Ignacio Albarracín, un abogado que luchó antes que nadie por los derechos de los animales. Para asociarse a la jornada, la comediante presentó a su mascota. Y la imagen dio que hablar.
En su cuenta de Twitter, Fátima mostró a su gata. Una gata blanca, divina. Hermosa como todos los animales, domésticos o salvajes. Pero hubo algo que llamó la atención. En realidad, dos cosas. Un poco, el nombre de la gata: Madonna. Y mucho más sus ojos, bicolores de un azul y un amarillo-dorado absolutamente intensos e incandescentes. A primera vista, Madonna parece de Boca.
“Les dejo una fotito con Madonna en el día del animal”, arrancó Fátima su tierno y simpático posteo, para enseguida agregar, sabiendo el efecto que generaría su gatita, que “los ojos de un animal tienen el poder de hablar un gran idioma. Cuidemos de ellos! Besos para todos”.
Los gatos con ojos de dos colores son en general los ejemplares blancos de las razas Angora turco, Persa, Botbail japonés, Van turco, Khao Manee, Esfinge y British shorthaire. El fenómeno que produce la singular tonalidad de su mirada se llama Heterocromía, y se da por una falta o un exceso de melanina, sin que esto represente un riesgo para su vista ni para sus movimientos.
Los seguidores de Fátima respondieron rápidamente a su posteo, en todos los casos para manifestar su admiración ante la hermosa gatita. La vedette Nerina Sist fue una de ellas. “Madonna, feliz día” escribió la rubia. No hubo ni una sola crítica. Ninguna: todos y todas le tiraron “florez”.
