Impresionante. Todavía sobrevuelan por los aires las repercusiones de semejantes confesiones, de esa pulsión por recapitular lo que vivió en el pasado reciente y la comparación con esta actualidad estimulante, que la impulsó a caminar por las nubes.
Flor Vigna sacudió todas las estanterías y se lanzó a compartir una enorme gama de revelaciones muy íntimas, de un cariz realmente profundo y que incluso atañe al universo de su sexualidad. La bailarina sintió el deseo de graficar la alucinación que le despierta Luciano Castro en el plano más privado.
En una entrevista que brindó a Infobae, Florencia transitó por carriles poco habituales en sus apariciones públicas y confesó que redescubrió los placeres más excitantes de la sexualidad a partir de conectarse con el ex de Sabrina Rojas, hasta utilizó una definición peculiar: “Era muy virga, apenas sabía hacer un misionero".
Claro que la valoración del amor con Castro implica la directa relación con Nico Occhiato, ese hombre con el que compartió muchos años de su vida. Más allá de lo referido a la sensualidad, Vigna también aportó un análisis de su lazo afectivo con su ex muy resonante.
Vigna catalogó el vínculo con Occhiato de manera tajante: "Para amores tóxicos, ya no estoy. Creo que me equivoqué. Que nos equivocamos”. Para profundizar en su pensamiento, la blonda añadió: "En su momento cometí el error de vivir para el otro. Estaba tan convencida de que era el hombre de mi vida que di todo y más".
Movilizada probablemente en compartir la experiencia del aprendizaje sobre las relaciones, Flor le tiró un palo por elevación a Occhiato: "Ya no vuelvo más a esos amores en los que te desvivís, das todo y luego te quedás vacía. Yo ahora estoy en un amor de paridad".
