Cuando Paulo y Rocío se conocieron, en 2015, los dos soñaban con formar una gran familia y acompañarse en todas. Y ahora, a poco más de un año del nacimiento de Isabela, y cuando faltan dos meses para que llegue su segunda hija, el panorama es bien distinto.
Separados de hecho, sin que haya mediado una charla, un acuerdo, mientras Rocío transita el último tramo de su embarazo por su cuenta, Londra está muy lejos, en Estados Unidos, donde hace unos días viajó sin siquiera avisarle. ¿Cómo se enteró ella? Por las redes.
“Siempre tuvimos proyectos de familia grande, sobre todo él. Isabela nació en julio del 2020, en plena pandemia. Tuvimos una crisis muy grande, pero él se mostró arrepentido y me pidió disculpas, hizo muchas promesas, apostamos a la familia y proyectos. Yo creí sus promesas y decidí apostar”, contó a Teleshow.
Rocío aclaró que poco después de empezar a buscar la segunda hija, empezaron nuevos problemas. “Empezó a salir más, a juntarse con amigos. No es que yo no quiera que se junte, el tema es que estaba ausente en la casa y cada vez volvía más tarde o prácticamente no volvía a casa”, dijo.
La joven aclaró que Londra se quedaba en la casa de los padres para que ella no viera los horarios y cómo volvía. Y aseguró que vivió sola todo este embarazo, con mucho temor, hasta que se animó a blanquear la situación con su familia y pedir ayuda.
“Tuve miedo por el embarazo, porque una vez me dejaron internada porque no me bajaba la presión, y tenía contracciones recurrentes, sola en la casa, sin tener a alguien cerca para ayudarme a bajar la escalera. Ahora mi familia me ayuda con Isabela, pero antes lo pasaba sola porque me daba vergüenza”, indicó.
Según contó, Paulo de a poco se empezó a alejar de las dos, siempre a las “andanzas y con un ritmo de vida no compatible con la rutina familiar”. Salía de noche o se quedaba jugando a la Play, en su mundo.
“Se despertaba a las 17 o las 19, y se cruzaba a tomar mate de los padres: estaba muy poco acá. Los primeros meses de embarazo estás muy cansada… y él, con los amigos. Recuerdo una madrugada que yo, descompuesta, le pedí que volviera para ayudarme y dijo que llamaba para fastidiarlo”, relató.
¿Cómo se explica Rocío estas actitudes del padre de su hija y de la beba en camino? “No creo que sea susto, tiene que ver las influencias, el entorno y él que no tiene madurez para saber dónde está y lo que debe hacer. Nadie le dice: ”No salgas con amigos”. ¡Al contrario!”.
Y luego aclaró que si primero pensaba que era una crisis más de pareja, todo cambió hace unas tres semanas, cuando Londra viajó a Estados Unidos. “Un domingo me dijo: ‘Tengo pensado viajar’, pero ahí quedó. Ya se había ido a Mina Clavero con amigas y amigos sin avisar, un fin de semana”.
“Pero cuando veo que estaba en Minnesota o no sé dónde… No le llegaban los mensajes que le mandaba y una semana después se contacta y me dice que no se podía comunicar por un problema en su teléfono. Pero para subir historias sí le andaba…”, dijo, dolida.
Rocío contó que no sabe cuándo Paulo volverá al país ni si estará presente en el parto de su hija. Sí entiende que no volverá a su casa. “No estuvo antes, cuando lo necesité. No es algo que espero”, dijo.
Y cerró: “Dadas las circunstancias, hoy en día me doy cuenta de que muchas situaciones no se pueden naturalizar. Toqué fondo cuando se fue a Estados Unidos y me enteré por las redes”.