Invitada al programa Estelita en casa, en las noches de América, Graciela Alfano realizó un vivo con Jay Mammon y le contó anécdotas de cuarentena en un repo que resultó sumamente divertido, ya que pasaron por todos los temas.
“Cuando se puso más firme el encierro con mi hijo decidimos unirnos. Los dos meditamos, hacemos yoga y nos acompañamos. La estamos pasando bastante bien. Casi no salgo a la calle. Desde el día 1 saco a pasear el perro y no mucho más. La gente hasta me carga”, dijo por el look que elige para salir de su hogar, en el barrio de La Recoleta, y que generó polémica en algún momento.
Como siempre, Jay fue para el lado picante y le consultó a Alfano si había hecho sexting con alguien: “Está bueno. Fue la primera vez que hice sexting, pero porque siempre tuve miedo de que me enganchen. Que hablen y es un papelón. Busque tips. Y vi por Telegram que ahí si te hacen el screen shot te avisa y lo retas al toque. Mi consejo es que tenés que ir preparada. Tener fotito o video preparada. Cómo que te la sacaste recién, pero no es recién. Y nunca mostrar la cara con el cuerpo”, afirmó Graciela.
Estelita dijo “tener sexo con vos debe de ser difícil porque el tipos deben tener miedo, cómo respeto y que sabes todo”. Y Alfano relató un episodio muy gracioso de hace unos años: “Un pibe me invita a salir cuando era un sex symbol. No existía todo esto de ahora y te llevaban a cenar bien. Mientras estábamos comiendo, termina la comida y se empieza a sentir muy mal. Me dice que va al baño, y no vuelve. Me dice que estaba pésimo. Y me pidió si me tomaba un taxi para irme a mi casa”.
“Me fui a mi casa. Al día siguiente me llama, después nos hicimos muy amigos, y me dice: ‘Mira, era tal el peso que tenía de tener de tener relaciones con Graciela Alfano que me tomé un tarro de vitaminas que tiene magnesio y parece que eso te hace ir al baño’. Pobre hombre comió e inmediatamente le dieron ganas. El era bastante conocido. Y eso le jugó en contra también por si contaba. Eso fue hace 20 años”, terminó la rubia que tuvo en estos días un flechazo con su vecino.
