En cuanto a historias paranormales hay para todos los gustos. Y las que suelen conocerse son las que relatan los famosos. Esta vez, en el programa Todo puede pasar, que emite la pantalla de El Nueve y que conduce Nico Occhiato, Graciela Alfano (67) relató una experiencia que vivió en el edificio en el que vivía.
“Yo tenía una vecina que vivía en el piso superior, era una mujer sola y grande y tenía muchos novios. Entonces todas las noches era chucu chucu, la cama que se movía”, empezó Grace.
“Tenía algunos novios que eran calladitos y otros que creían que eran Tarzán”, siguió la artista. “La cuestión es que un día la mujer se muere y los deudos vacían el departamento y lo ponen a la venta”, agregó.
“Una noche escucho gemidos. Me desperté y me di cuenta que estaba muerta, que no podía ser. Me voy a seguridad y le aviso que hay alguien. Me dice: ‘No señora, no hay nadie’”, siguió.
“Llamé a una bruja, a esas señoras que ayudan a elevar a los espíritus”, reveló Grace.
Ante la insistencia de gemidos, Graciela tomó una decisión. “Llamé a una bruja, a esas señoras que ayudan a elevar a los espíritus”, reveló. “La mujer viene, prende una vela, fuimos a mi dormitorio donde solían aparecer los ruidos. Nos vestimos de blanco con una flor blanca”, agregó.
“En un momento le empieza a hablar: Estás acá, la nombra, la nombra. Y en un momento hay como unos ruidos y la mujer me dice: ‘Está acá’”, continuó.
“Le empieza a explicar que tenía que elevarse, decía unos mantras y hacía ruidos distintos a los de siempre. Como que golpeaba el piso. En un momento dado la mujer empieza a hablar con otra voz y dice: ‘Acá estoy’”, sumó ante la sorpresa del panel.
“Yo no sé si estaba influenciada, pero era la voz de esa persona. Yo estaba pálida. Y en un momento le dice: ‘¿Por qué te quedás? Tenés que elevarte. Y con la voz de la persona muerta dijo: ‘¡Porque me gusta la matraca!’ Evidentemente era una ninfómana”, cerró Grace.
Pero eso no fue todo. Además, advirtió: “Tiene un final impresionante porque a esa torre va a vivir nuestra vicepresidenta, la doctora Cristina Fernández de Kirchner. Yo no pude sacar a fantasma, espero que el fantasma no la moleste”, concluyó.
