Paloma Ortega tiene 19 años y hoy vive en Londres, donde hace muy poquito viajó acompañada de su mamá con una oportunidad de trabajar como modelo, una llave que, según Guillermina Valdés, le abrirá camino para otras cosas, como le pasó a ella, que casualmente a su misma edad probaba suerte en Nueva York.
Incipiente modelo y joven con inquietudes artísticas, Paloma es, ante todo, una chica “sin etiquetas” que vive en libertad sus relaciones sexo-afectivas, siempre apoyada por Guillermina desde el día uno, aquel en el que le contó lo que le pasaba.
"Ni siquiera soy pro diversidad, porque no registro las diferencias", aseguró la empresaria, en una entrevista para Infobae en la que recordó ese momento tan especial para las dos, cuando Paloma no pudo más y a los 16 le confió que no era heterosexual.
"Me lo contó llorando, con angustia, y después se quedó encerrada en su cuarto durante un tiempo. En un primer instante fue tremendo porque yo no lo imaginaba. Pensé: `¡Ay, qué mal! ¡¿Cómo no me di cuenta?! Qué dormidita…’. ¡¿Qué le pasa, señora….?!”, rememoró.
La pareja de Marcelo Tinelli aclaró que al verla mal le ofreció su apoyo incondicional e ir a la psicóloga, “pero no porque estuviese mal lo que me había contado, sino buscando que ella estuviese bien”. “En realidad ya estaba bien, pero debe haber sido difícil decírmelo", dijo.
En este sentido, Guille reveló el pedido que le hizo a la adolescente, que hace unos meses se mostró muy cariñosa con la hija de Lalo Mir: "Para mí fue un: ´Bueno, okey. ¿Estás bien? ¿Qué necesitás? Presentame a quien sea tu amor cuando venga… Está todo bien’”.
Y concluyó, consciente del rol que tiene con sus hijos, Dante, Paloma, Helena y Lorenzo: “Como mamá no hay mucho más que hacer que acompañar y pretender que sean felices".
