Guillermo Coppola tuvo el privilegio de vivir de cerca dos de los momentos más importantes de la historia deportiva argentina, los mundiales de 1986 y 2022. En el primero fue uno de los protagonistas, ya que estuvo al lado de Diego Maradona, pero en el actual, fue como un hincha más en Qatar.
El mítico representante de futbolistas aterrizó hace unas horas, ya que luego de presenciar la final contra Francia, se tomó un vuelo como tenía planeado. Ni bien tocó el suelo de nuestro país, fue entrevistado por LAM, en donde se animó a hablar de las cábalas de las mujeres de la Selección para los partidos.
Casi todos en Argentina tienen cábalas, aunque sean mínimas, por lo que las esposas de los campeones del mundo no serían la excepción. "Había mucha cábala, como bien decían ustedes, el mismo televisor, el mismo calzoncillo, la misma vincha, todo. Lo vivían ellos (los futbolistas). Son cabuleros totales", afirmó Guillermo.
Y agregó: "Las mujeres de los jugadores, por ejemplo, se juntaban el día anterior no, el día anterior a ese, dos días antes del partido, a cenar. Estaban todas juntas. Yo digo que hubo un aliento en todos los sentidos, de los hinchas, la familia que hizo el aguante, del lugar donde estaban concentrados...".
Coppola tendrá su propia serie de TV, es por eso que la otra vez dio algunos detalles de la misma: “Sé que he tenido un recorrido interesante, prácticamente las viví todas. Por eso creo que faltaba esto. Fue una vida de trabajo, amor y respeto. Fue una vida linda y divertida pero con altibajos y errores como la de todos”.
En cuanto a los motivos por los cuales se animó a dar este paso: “Yo soy un laburante, laburo desde los 12 y acabo de cumplir 74. Hace 62 años que trabajo y la gente me da cariño permanente y lo digo emocionado. Entonces faltaba esto. Me lo pedía la gente y también otras plataformas”.
“La idea es reflejar la vida de uno fundamentalmente basada en los años 90, esos años en los que hubo mucha diversión. Pero mi vida tuvo altos y bajos, así que entiendo que también estarán esos años oscuros cuando estuve preso”, detalló el ex amigo íntimo de Diego.
Finalmente, Coppola reconoció que en ese entonces, cuando la relación con Diego estaba en un buen momento, le tocó atravesar la situación más difícil de su vida. “No fue un jarrón, fue un garrón. Si bien el juez me dejó preso y cumplí mi condena, me queda el sabor amargo de mi vieja yéndome a visitar con una bolsa de comida y sometiéndose a esas requisas donde ya sabemos lo que te hacen”.
