Allá por 1988, luego de terminar el colegio secundario, y mientras empezaba el terciario, ese joven de 1,89 m. de altura, cabello claro y ojos celestes comenzaba a dar sus primeros pasos como modelo, una profesion en la que llegaría a protagonizar 50 publicidades internacionales y le permitiría recorrer el mundo.
Sin embargo, unos años después Horacio Cabak se alejó un poco de las pasarelas y dio paso a un nuevo desafío laboral. Y fue en esa nueva etapa profesional donde a los 24 años le sucedieron dos grandes momentos en su vida que duran hasta el día de hoy: debutó como notero en televisión y conoció a Verónica Soldato, su esposa y madre de sus hijos.
“Vero tiene que ver con el medio, pero indirectamente. Con mi carrera anterior porque trabajaba de booker en una agencia en la que yo no trabajaba. Nunca nos habíamos cruzado, hasta que coincidimos en la casa que alquiló un amigo en común que nos invitó", recordó el conductor de La jaula de la moda.
"Con Vero coincidimos en la casa que alquiló un amigo en común que nos invitó. Cuando se dio, ya sabíamos cómo era cada uno en la convivencia", recordó el conductor.
Y siguió, “empezamos a convivir ahí sin tener ningún tipo de relación. Después de un tiempo, cuando se dio el romance, ya sabíamos cómo era cada uno en la convivencia, en el día a día, antes de tener un vínculo afectivo”.
A pesar de la elección de resguardar su vida privada, Cabak se acordó: “tuve mi momento de salir e ir a fiestas cuando el medio aún no me prestaba atención. Cuando empecé a tener una relación estable con mi mujer fue una decisión. Hay un límite”.
Con la relación súper afianzada, tras viajar, salir con amigos y de disfrutar la vida en pareja, a sus 33 años decidieron formar una familia. Sin embargo, a Vero y Horacio no les fue fácil llegar a la paternidad y lo lograron gracias a un tratamiento de estimulación ovárica.
“Tuve la suerte de disfrutar con mi mujer la vida en pareja durante casi 10 años donde no teníamos limitaciones. Cuando llegó el deseo de ser padres estuvimos un par de años con el deseo, que fueron complicados hasta que tuvimos a nuestro primer hijo Ian (17) y afortunadamente fuimos padres”, confesó Cabak.
Tres años más tarde la pareja estaba esperando mellizos a los que llamaron Chloe y Alán (15). “Cuando Ian tenía un año y medio, comenzamos a buscarle un hermanito. No queríamos que fuera hijo único”, contó el modelo quien en 2019 celebró tres aniversarios: sus 50 años en octubre, 25 de carrera y 25 también junto a Verónica Soldato.
“Ves el recorrido, y como en toda relación larga hay momentos que están bien y otros no, pero es una decisión que ninguno de los dos nos arrepentimos de haber tomado, estamos muy orgullosos de lo que nos pasó a nosotros como pareja y como familia”, declaró el conductor.
"El casamiento no es algo que nos haga falta. Con o sin papeles, tengo una familia bárbara", resaltó Cabak.
En cuanto a no haber formalizado la relación, aclaró, “ella a veces me plantea el nunca nos casamos, pero porque se dio. Nunca tracé un plan previsible, creo que justo estos 25 años de trabajo y los 25 años de pareja se fueron dando de un modo similar, fuimos viendo qué nos gustaba, qué había que cambiar”.
“Con mi mujer todos los años se renueva el pacto naturalmente. Verónica es muy compañera y nos compensamos. Somos una buena dupla. El casamiento no es algo que nos haga falta. Incluso me da un poco de nervios, ¿a ver si ponemos el gancho y entramos en crisis? Con o sin papeles, tengo una familia bárbara”, remató Horacio.
Una pareja que encontró sus propias leyes a la hora del amor, y que entre sus elecciones optaron por no exponerse. Tal vez por eso, resulta tan difícil encontrar fotos de archivos de la familia. “Mi mujer está cómoda sin que la reconozcan y mis hijos tienen una vida como el resto de los amigos”, explicó el presentador.