Rocío Oliva está transitando uno de sus mejores momentos. Alejada de Diego Maradona y con un nuevo romance encaminado, la futbolista se mostró feliz de estar trabajando en Gimnasia de La Plata y tomó una drástica decisión para cerrar por completo su ciclo con el director técnico.
Separada hace más de un año, la mediática optó pasar por la aguja y la tinta y tapar el tatuaje que tenía junto al astro del fútbol. En 2014, la entonces pareja decidió tatuarse en conjunto, cada uno con el nombre del otro.
Pero luego de seis años de noviazgo, y muchos conflictos internos, decidieron separarse y el padre de Dalma y Gianinna no dudó en hacerse un cover up para así olvidar a Rocío por completo.
Sin embargo, a principios de este año, Oliva había declarado en los medios que aún no tenía pensado borrar el nombre de Diego hasta que sintiera que la incomodaba cargarlo en su brazo: “Me enteré que iba a cambiar el tatuaje. No sé si lo cambió o no pero si le hace bien para mí está bien. Yo por ahora no pensé en borrármelo quizás en algún momento cuando tenga pareja y me diga 'che... mmm' por ahí sí, pero hoy no me molesta".
Pero el nuevo romance de la futbolista, hace poco más de tres meses, provocó la decisión final de tapar aquella escritura con un nuevo diseño. El periodista Lío Pecoraro fue el encargado de mostrar en su cuenta de Twitter el tatuaje de una rosa sin espinas: “¡Decisión tomada! Rocío Oliva se sacó el tatuaje que se había hecho con el nombre de Diego Maradona. NO VA MÁS".
MÁS TATUAJES
Además, Rocío Oliva aprovechó su paso por el tatuador y decidió realizarse más de un nuevo diseño. En su brazo escribió “Luciano”, el nombre de su hermano, y en su hombro se dibujó un pequeño corazón.