En la noche del jueves, Julieta Ortega estuvo como invitada al ciclo Los Mammones en donde se sometió a las picantes preguntas de su conductor, Jey Mammon, y ahondó en los detalles de sus inicios en el ámbito actoral y contó anécdotas nunca antes reveladas de su vida privada.
Dentro de este contexto, y luego de hacer un repaso por su amplia carrera, la actriz se animó a hacer el juego de las paletas, en donde debe contestar a las preguntas del presentador tan solo con sí o con no, y en caso de ser necesario, ampliar un poco más la información de la consulta.
Pero para sorpresa de todos, Julieta habló de su relación con Nacha Guevara y reveló que no comenzó de la mejor manera posible a pesar de que con el paso del tiempo continúa admirándola y “entendiendo” su manera de ser.
Todo comenzó cuando Jey le preguntó si le “resultó difícil trabajar con Nacha”, y Ortega se quedó pensando la respuesta, hecho que llamó sumamente la atención. Ante eso, quiso aclarar el por qué de su duda y confesó que su vínculo comenzó con la ficción El tiempo no para, emitida en 2006: “Laburamos juntas solito ahí… Pero te voy a decir lo que pasa con Nacha”.
Acto seguido, aclaró cuáles fueron los motivos que llevaron a Guevara a comportarse de una manera estricta y complicada con ella y con el resto del elenco: “Ella es muy exigente, muy responsable, llega tres horas antes a una grabación y nosotros y nosotras ahí éramos muy chicos. Hacíamos bardo, llegábamos tarde, y ella era brava”.
Asimismo, confesó que recibieron fuertes palabras por parte de la actriz y se mostró molesta con las barbaridades que les dijo, a pesar que, con el paso del tiempo, explicó que “logró entenderla” y que aún la admira como profesional: “Nos ha dicho de todo menos lindo y buenos actores… Igual la recontra respeto, tiene con qué”.