Julieta Poggio se convirtió en una de las figuras más reconocidas del último tiempo en el espectáculo argentino. Por eso, la gran mayoría está interesado en conocer un poco sobre su privacidad. En una reciente entrevista con el Pollo Álvarez, confesó el extraño método religioso que tiene en su vida.
Luego de la fama conseguida por Gran Hermano, la actriz no paró de cosechar éxitos y cada día su figura se agiganta. Sin embargo, hay mucho de ella que no se sabe. Un claro ejemplo de su lado desconocido, es que es una persona sumamente religiosa, pero no con Dios, sino con una figura más terrenal.
Para empezar, explicó cómo se autodefine: “Soy la drama queen (reina del drama) hecha en persona. Es como que si algo me angustia, me frustra, me agarra un nudo en la garganta y me salen las lagrimas. Un segundito, lloro y ya estoy para seguir. No me contestan un mensaje y me dan ganas de llorar… Y lloro".
“Me gusta mucho liberar. Todo lo que me pasa (me gusta) hablarlo, comunicarlo, expresarlo. Si me lo guardo, me hace mal. La noche. No puedo dejar la noche. Me dan ganas de hacer cosas, salir. Los miércoles, jueves y viernes son de joda, pero el sábado es la verdadera noche”, sumó.
A QUIÉN LE REZA JULIETA POGGIO
Sobre la persona a quien le reza, Julieta reveló que es Emilia Mernes, por lo que dijo: “Siempre me gustó demasiado. Siento mucha admiración por ella. Y cuando salgo, veo un clip de ella diciendo que yo era su favorita. ¡Me volví loca! Es mi ídola suprema: le rezo. Nunca fui tan fan de alguien. Realmente veo sus fotos y digo: ‘Por Dios, la amo mucho, la admiro’”.
“Ella bailaba y yo lloraba de emoción. Nos sacamos una foto, la pude conocer, abrazar. No supero no poder comentarle tipo ‘potra’, ‘diosa’, ‘divina’. Me regulo un poco, pero a veces le mando ‘qué hermosa sos, la estás rompiendo, te amo’. Y ella me responde con corazones. Es re buena. Y yo a veces digo: ‘Soy fan, ¿qué voy a hacer?’”, cerró.
