A fines de julio del año pasado, la China Suárez se convirtió en madre por tercera vez luego de la llegada de Amancio, su primer niño y, además, su segundo descendiente de la mano de Benjamín Vicuña.
Pero desde el nacimiento de Rufina, su primera hija fruto de su pasada relación con Nicolás Cabré, la modelo fue mostrando algunas cotidianeidades de la crianza y de las travesuras y aventuras que le presentaban día tras día sus pequeños.
En este último embarazo, la actriz se lució cada vez más confiada en su rol de madre y comenzó a compartir a través de su Instagram los primeros crecimientos de su pancita, hasta el lado más real de la maternidad hoy en día, a casi un año de su nacimiento.
Tras pasar la cuarentena obligatoria encerrada en su casa y sin poder llevar adelante sus proyectos laborales, la China volvió al ruedo de las grabaciones, y a pesar de que no contó con lujo de detalles cómo será la nueva ficción en la que está trabajando, si decidió compartir un pequeño accidente que sufrió, producto de estar acompañada de Amancio a cada momento.
A través de sus stories, Suárez lució cómo se manchó el vestido que llevaba durante su jornada laboral con leche materna y con un divertido gesto en su rostro explicó su situación: “Trabajar y dar la teta”. Además, a modo de broma, utilizó los gifs animados de una vaca y un hombre que se golpea con la mano en la cabeza demostrando que acaba de pasar algo increíble.
No obstante, sus seguidores, especialmente mujeres que fueron madres, no solo la apoyaron en esa situación, sino que la compadecieron ya que sufrieron los mismos traspiés durante sus horas de trabajo y debieron salir corriendo a limpiarse y cambiarse. Sin embargo, muchas de ellas también destacaron lo natural y lo bello que culmina siendo esa situación, ya que previamente se realizó un acto de amor entre la mamá y su pequeño bebé.