Y un día activó el proceso, ese camino complejo, pero maravilloso, de perseguir el sueño de abrazarse a la maternidad. Una decisión que meditó hasta el hartazgo y que finalmente tomó como propia para intentar cristalizar el anhelo magnánimo que vibra en su interior.
Rocío Marengo aportó indicios, hace un tiempo, de lanzarse al desafío de convertirse en madre soltera, tras la negativa de su pareja Eduardo Fort de volver a ser padre. Lejos de frenar sus impulsos por esa discrepancia, la mediática entendió que existen otros métodos.
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Así, la ex MasterChef se brindó a un tratamiento específico, exhibió los distintos pasos del proceso en sus redes sociales y también se abrió de par en par para contar que no logró el objetivo. "No hay bebé en camino. Les quiero agradecer a todos por el cariño, el respeto y el apoyo que me dieron desde el momento en el que compartí mi decisión", posteó.
Con las emociones a flor de piel, en ese momento Rocío agregó: "El camino muchas veces es largo. ¡No hay que bajar los brazos! Muchas emociones, puse mi cuerpo, mi mente y mi corazón. Estoy triste pero ¡fui muy feliz intentando y luchando por mi deseo!”.
Tras varias semanas de esa confirmación adversa, Marengo volvió a abordar el tema en su Instagram, a partir del feedback que activó con sus millones de seguidores, donde le llegaron dos consultas específicas respecto a si continuará con el intento de la maternidad.
Un follower le preguntó: "¿Vas a tener un bebé?". Así llegó la revelación sensible y conmovedora de Rocío: "No sé si podré". Y en cuanto a si se someterá a un tratamiento en breve, Marengo admitió: "¡Por ahora, no!".
