MasterChef transita la recta final del programa y con tan solo 7 participantes la competencia se pone cada vez más complicada. Cada noche se viven momentos de extrema tensión debido a que todos quieren seguir adelante y conseguir el premio mayor.
Si bien a veces hay tensiones entre ellos, desde hace tiempo se puede observar que intentan concentrarse mucho en la preparación de sus platos en esta recta final. A pesar de esto en la noche de este miércoles 7 de julio ninguno logró destacarse con certeza y el jurado no dudó en comunicárselos.
Mirá También
El sincericidio de Damián Betular con Daniela sobre su lugar en MasterChef: "Que cerca de…"
Uno de los peores platos fue el de Rodrigo a quien le toco cocinar pescado. El joven intentó reírse de la devolución de cada uno de los jurados y un comentario de Germán Martitegui lo fulminó:
“Me recuerda a la infancia cuando comía arena en la playa, porque no tiene gusto a nada igual que la arena, el pescado tampoco tiene gusto a nada. Y el bock choi tampoco. Es terrible”.
Luego de matarlo, el bioquímico intentó pasar la situación de la mejor manera y expuso entre risas: “Siempre se tiene una esperanza, pero bueno, qué querés que te diga”.
Mirá También
La técnica milenaria de Germán Martitegui para frenar la pelea de Rodolfo y El Turco en MasterChef
WANDA LE TIRÓ UN PALITO A MAURO EN MASTERCHEF
Wanda no deja de ser ella y de enviar palitos o comentarios lapidarios haciendo referencia a su historia de vida. En la noche del lunes 3 de julio, la conductora no dudó en darle un consejo a Silvana y le indicó que “no confiara en su esposo”.
Todo comenzó cuando ella se acercó a su estación y le preguntó qué es lo que iba a hacer luego de su paso por MasterChef. En ese momento, la participante le confesó que su sueño era tener su lugar de gastronomía propio y ella le sugirió que en la caja tenía que dejar a alguien de confianza.
“Y de la caja sobre todo, hay que estar atentos a que no te roben que no te toquen nada”, indicó Wanda. Ella la miró y le reveló que ya tenía quien maneje la caja: su esposo Marcelo.
“¿Silvana le vas a confiar tu negocio a tu marido? Es lindo, pero yo un ojo lo dejaría ahí”, lanzó picante. “Él cuenta mucha plata sin mirar casi. ¿La estoy pifiando ahí?”, le explicó. “No, no” concluyó dejando entrever que no estaba segura de confiar tanto en los maridos.
Mirá También
