La noche del 17 de octubre, la casa de Gran Hermano recibió a 18 participantes que intentarán quedarse el mayor tiempo posible aislados, a fuerza de alianzas estratégicas, movidos por su carisma y personalidad. Y Martina Stewart Usher ya dejó en claro cómo es la suya: polémica y discriminatoria.
Es que la joven de 25 años, oriunda de Tigre, futbolera y “fan de Wanda Nara”, como se definió, apenas en su presentación mostró la hilacha con un comentario sobre la orientación sexual que cayó pésimo a muchos de los que siguieron el debut del reality de Telefe.
Para dar cuenta de cómo es ella en pocas palabras, Martina eligió dejar en claro que la bisexualidad no le va. Es más: le genera asco. ¿Qué dijo la nueva hermanita que asegura que tuvo romances con futbolistas, y vive con sus papás y su mascota en la Zona Norte de Buenos Aires?
“A mí, personalmente, me gustan los chicos y las chicas no me atraen para nada. No entiendo eso de la bisexualidad. Me da un poquito de asquito”, aclaró, y luego insistió: “Rari. Para analizar”.
“Yo considero que si ser caprichosa es conseguir todo lo que quiero, soy caprichosa. Mi ídola Wanda Nara, hizo todo bien. Vivo con mi familia y Atilio, mi perro”, dijo también la chica que, para más datos, es profesora de Educación Física, con lo cual sus declaraciones heteronormativas cayeron aún peor.
Otra muestra de cómo el casting de GH representa a las mujeres en esta edición es "Coti", la correntina que declaró: "No me molesta que la gente en la casa me mire, quiero ser la protagonista. Mi estrategia es jugar con los hombres, que se peleen entre ellos y generar rivalidad". En fin.
