Darío Barassi es uno de los hombres más queridos de la televisión argentina. Con su carisma único, logró ganarse el corazón de cientos de seguidores, que lamentaron mucho su partida de Ahora Caigo, programa exitoso de Canal 13, al igual de como en su momento pasó con 100 argentinos dicen.
Abocado a su carrera como actor, Barassi viene de atravesar un momento determinante en su vida. A casi un año de la muerte de su mamá, Laura, quien luchó incansablemente contra un cáncer de páncreas, el conductor decidió homenajearla en vísperas del Día de la Madre.
“Te extraño. Mucho. Ese día te colocaron un dispositivo para la quimio. Me dejaron entrar, pues Barassi, y nos quedamos horas charlando de todo, con olor a clínica y muchos aparatos haciendo sonidos. Ansiedad, risas y lágrimas. Todavía no sabíamos lo que se venía, todavía pensábamos que se podía”, comenzó diciendo Darío.
Con su corazón estrujado de dolor y a más no poder, expresó sus sentimientos en las palabras más profundas. Saliendo de su corazón, para Barassi es muy difícil convivir con la angustia de su madre, pero hoy le queda el consuelo de que su sufrimiento hoy ya no está presente.
“Mis hermanos querían saber cómo estabas, te dije ‘foto viejita’ e inmediatamente tiraste un fuck you con tu cara de ojete. ‘Que no jodan’, me dijiste, con tu acidez y humor de siempre. Yo, muy típico mío, hacía preguntas de a quién preferís o si te fueras a una isla desierta qué 3 cosas te llevarías’”, deslizó Darío.
EL PROFUNDO DOLOR DE DARÍO BARASSI
Uno de los momentos más emotivos en su relato, fue cuando el conductor recordó la pregunta que le hizo respecto a quién era el hombre de su vida. Laura, con toda la ternura de madre, no dudó en elegir a sus hijos, quienes fueron los pilares más determinantes de sus días.
“Estaba mi viejo entre las opciones, algún que otro novio, tu segundo marido a quien amábamos, pero me frenaste en seco. Me miraste a los ojos y me dijiste: el hombre de mi vida son mis 3 hijos, no jodas más con las preguntas y tráeme un café. Mi madre, más vos no se puede”, destacó Barassi.
Y sentenció muy emocionado: “Confieso que estoy muy psicoanalizado y no sé si quería ser el hombre de la vida de mi vieja, pero ahora que no te tengo acá, me siento orgulloso, feliz y pleno de haber ocupado ese lugar para vos. Una vida entera queriéndote, cuidándote y disfrutándote. Se siente el vacío y aún duele. Y está bien que sea así. No lo apuremos”.