Un escándalo salpicó a Pampita, una situación controversial que protagonizó su cuñado, el hermano de Roberto García Moritán, cuando lo detuvieron en Recoleta a bordo de su auto y se le detectó que conducía con un grado alto de alcohol en sangre.
Ese episodio adquirió tintes más polémicos cuando Francisco García Moritán se comportó erráticamente con los oficiales de tránsito, dado que trascendió que les faltó el respeto verbalmente y que tampoco disponía de la documentación de su vehículo en regla.
En algún momento llegaría la declaración de Carolina Ardohain, dado que de manera lógica los medios de comunicación buscarían su opinión. Eso aconteció en una nota que le realizó Intrusos, en la previa del inicio de una nueva edición del Bailando por un sueño.
Con un lenguaje corporal de incomodidad, Pampita intentó expresar su pensamiento al respecto del comportamiento erróneo de su cuñado y sostuvo: “Lo que puedo decir es que tengo muchos familiares y lo que hagan mis familiares no me compete. Es inmanejable, tengo primos, tíos, sobrinos, cuñados, padrinos”.
PAMPITA OPINÓ DE LA DETENCIÓN DE SU CUÑADO
“Me resulta imposible opinar por ellos y sus acciones”, exclamó la bella modelo, en un razonamiento lógico, ya que no existe responsabilidad alguna en los errores de las personas que forman parte de su constelación familiar. Y añadió: “Siempre me sucede lo mismo”.
En pos de ahondar en esa reiteración de caer en la volteada por maniobras de sus seres queridos, Pampita exclamó: “La que está expuesta y elige tener este trabajo soy yo, entonces respondo por las acciones mediáticas mías. Lo que le pase a los demás no me supera, pero no tengo nada que ver”.
