La nueva edición de Gran Hermano fue muy comentada, pero sobre todo recibió muchas críticas. Aunque el rating cada vez estaba más lejos de la temporada de Marcos Ginocchio y Julieta Poggio, los participantes fueron el centro de las críticas por sus actitudes. Las quejas sobre ellos no dejaron de llegar.
En el programa Bendita, Edith Hermida no se guardó nada y dijo: “¡No saben jugar y están todo el tiempo quejándose de todo!”. Hermida fue muy dura con los jugadores, dejando en claro que no le gustaba cómo se comportaban. Su crítica apuntó a la falta de ganas y compromiso de los participantes.
Agustín Guardis (Frodo) también opinó sobre el tema y no tuvo pelos en la lengua. “Lo lamento por del Moro si tienen bajo rating y metieron tres ‘Gran Hermano’ juntos y la gente ya está podrida de ver siempre lo mismo. No se les cae una idea, viven interviniendo la casa y no dejan que los chicos, adentro, jueguen en serio”, comentó.
Frodo fue directo al criticar la falta de ideas frescas y la intervención constante en la casa. Delfina Gerez Bosco también dio su opinión y dijo: “A mí también me parece que los que entran ahora se piensan que se las saben todas, entonces empiezan ‘uh no, hagamos esto o lo otro’”.
LAS CRÍTICAS CONTRA SANTIAGO DEL MORO
Según ella, los nuevos participantes no entendían cómo funcionaba el juego y trataban de cambiar todo sin pensar en la dinámica del programa. Horacio Pagani también opinó sobre el tema y dijo: “Ese no es un programa para Santiago del Moro, y lo dije siempre, es un tipo serio, tranquilo y está metido en ese carnaval y no es para él”.
Pagani consideró que del Moro no encajaba en el estilo del programa, y que su forma de ser no era la adecuada para ese tipo de show. En resumen, la nueva edición de Gran Hermano no logró enganchar a la gente como se esperaba. Las críticas hacia los participantes y la producción fueron muy duras.