Germán Martitegui es considerado el miembro del jurado más exigente de todos y cuando no se cumple con sus expectativas, suele haber algo de tensión con él. En esta ocasión, fueron el plato de Fonzi el cual no alcanzaba los estándares del chef.
El desafío de la noche era cocinar un plato que representara la gastronomía de Buenos Aires. Para cumplir con esta prueba, a Fonzi se le ocurrió preparar choripanes, en honor a los de la Costanera de la ciudad. Él pensó que era una idea ganadora pero el chef opinó distinto.
La primera pregunta que le realizó Martitegui fue si el chorizo que utilizaría sería hecho por el actor. A lo cual, Tomás respondió que no porque agarró en el mercado los que ya venían preparados. Esta decisión no le agradó nada a Germán, quien siguió indagando. "¿Vas a hacer el pan?", indagó el miembro del jurado, a lo que Fonzi volvió a responderle que no.
El chef al ver que la idea del actor no era buena, le aconsejó que hiciera una especie de pan chato. Fonzi como no había planeado cocinar pan le pregunto a Martitegui si podía ir al mercado. "Yo te presto harina", saltó Mery del Cerro, creyendo que estaba ayudando a su compañero. "Decime que no", le gruñó Tomás a Mery para darle a entender que no quería ese ingrediente porque no quería seguir los consejos del chef.
"¿Ya se fue?", dijo Fonzi al ver que mientras acomodaba su mesa de trabajo el miembro del jurado ya no estaba con él. "¿Cómo?", le preguntó amenazante Martitegui mientras regresaba a donde estaba el actor. "No está convencido de mi plan. Nada de lo que le digo lo convence", reveló frustrado el actor.
"Estoy bien", le expresó Fonzi con seguridad al chef sobre su plato, logrando que Germán se alejara. "Dale, dale, pónganme una ficha, boludo", dijo Tomás y agregó: "Confío en la combinación y repito, en el ensamble".