La Voz Argentina está llegando a su final, pero las polémicas que rodean al programa liderado por Marley no se hacen esperar. Días atrás Julia Ferrón, ex participante, reveló la discriminación que recibió por parte de la producción. Más allá de apaciguar la situación, la concursante apuntó contra Mau y Ricky y los trató de violentos.
“Siento, y creo que es una sensación de todos, que ellos son niños mimados. Son niñitos muy cuidados por sus papis y esta carrera la han logrado gracias al apellido Montaner. Están como subidos a un pedestal y nadie los puede alcanzar, están siempre a la defensiva. Me gritaron que bajara la foto que me había sacado con ellos. Mucha niñería para la edad que tengo”, sostuvo.
Y agregó contra el esposo de Stefi Roitman y su hermano: “Me dijeron que me bajaban del certamen por hacer un mal chiste en el aire. Ahí entendí que los votos de la gente no es que sean tan importantes. Por otro lado, dijeron que yo era groserísima, que soy una persona ordinaria. Mientras uno me agarraba del brazo y el otro me hablaba con prepotencia. Realmente, para mí fue grave, porque no dije nada con maldad y están ensuciando mi imagen”.
Anteriormente, sobre el programa reveló: "Mirá, yo siempre resalté el tema de que la producción me había tratado muy bien y eso. Pero hablando con alguien de ahí, me enteré hace unos 15 días que ya se sabía quién iba a ganar. Yo más o menos me inclino y ustedes se deben imaginar de quién se trata".
"Lo dejo a criterio de toda la gente. Se veía cierta preferencia y favoritismo. Yo sé que de todo lo que yo recorrí, ninguno de ellos lo hicieron. Son todos muy chicos. Se generó un ambiente incómodo. Yo creo que esto de la música no tiene edad", continuó su descargo Julia.
"Fue discriminación eso. Vos ves el team de Mau y Ricky y son todas chicas muñequitas o los chicos... Se busca un producto para después venderlo. Mercedes Sosa en esta época hubiera quedado en la nada. La hubieran dejado a un costado por su estética", añadió.
Eso no fue todo porque contó: "Estoy agradecida porque se me dio una oportunidad muy linda y me trataron bien. Fue una experiencia muy linda más allá de todo lo que pasa después. La producción no quería que yo dejara el hotel, pero me pegué una escapada para dar un show".
"Yo tengo que darle de comer a mi hijo, tengo que dejar dinero. Y esas cosas...son demasiados estrictos. No se ponen a pensar que uno tiene una vida y un montón de cosas para resolver. Yo valoré cada instancia y estoy muy agradecida con todos", expresó.