Wanda Nara, siempre Wanda Nara. La influencer regresó a la más alta exposición en los últimos días y otra vez por una situación nociva, lejos de las beldades de su cotidianidad repleta de lujos y excentricidades, sino más bien por una nueva crisis con su marido, Mauro Icardi.
El futbolista la dejó de seguir en Instagram, acto seguido la blonda se exhibió sin el anillo de matrimonio y como si fuese poco una amiga contó en los medios que pronto llegaría un anuncio de la pareja. Todo un combo explosivo, que direcciona la lupa en una posible separación.
Atento a este embrollo, el que saltó a la escena es Andrés Nara, el mismísimo padre de la influencer que pareciera no perder oportunidad de ganar espacio en la pantalla. El progenitor de la famosa lanzó una serie de concepciones muy picantes contra Mauro.
En cuanto al Wandagate, es decir la infidelidad del futbolista con la China Suárez, Andrés tiró: “Conociéndola a Wanda no creo que sea fácil perdonar ciertas situaciones. Lo que pasó a ella le queda y no lo borra. Wanda es muy mental y ella se manifiesta en su posición, lo ha masticado y analizado”.
Hasta que definitivamente el papá de Wanda apuntó con fiereza contra Icardi y lo destrozó al aseverar: “Obviamente que esto que pasó es un antes y un después. Ellos llevan un mote de mediáticos muy fuerte y eso tiene un peso adicional. No es una pareja cualquiera. Lo que ha pasado lleva la mochila internacional. Lo que hizo es imperdonable, si”.
Y también le pegó un palazo a su hija en ese perdón exprés que le regaló a su marido infiel: “Un chat es sinónimo de divorcio o de separación dijo ella en un chat. Y tomó otras determinación y me hace ruido. Conociéndola un poco varió con respecto a algunos años atrás”.