El efecto contrario, absolutamente en la dirección opuesta a sus intenciones. En esa necesidad de la producción de Gran Hermano de estirar la temporada, los familiares ingresaron al juego y una de ellas perjudicó notoriamente a su hija, a tal punto que le provocó la eliminación.
La entrada de Aixa se convirtió en un explosivo para Zoe Bogach, dado que la inmensa mayoría la votó con el sufragio negativo y estimuló su partida de la competencia tras cinco meses en el aislamiento hondo de la realidad. Los especialistas aseguraron que la madre actuó como un catalizador negativo.
Las actitudes de la progenitora, con ese cuidado extremo, la urgencia por hablar, las intromisiones en las charlas, la sobreprotección y algunos comentarios xenófobos estimularon a los fanáticos a llenarla de votos, en la reciente eliminación del pasado domingo.
Como si todo eso fuese poco, Aixa acaba de romper el silencio con una actitud polémica, que refiere a una campaña pensada, ideada y ejecutada que llevó a cabo para intentar por todos los medios, hasta desesperados, que su hija continuara en la casa más famosa.
LA MAMÁ DE ZOE REVELÓ QUE GASTÓ 8 MIL DÓLARES EN VOTACIONES
A través de su cuenta de Instagram, la madre de Zoe salió a describir la inversión millonaria que realizó por su heredera y sorprendió a todos con los datos escalofriantes de la montaña de dinero que gastó en las votaciones, en cada oportunidad que cayó en placa. “Nunca di detalles del dinero votado en las placas de mi hija”, arrancó.
Y luego reconoció el dineral en moneda extranjera: “Esta vez lo voy a hacer: ¡fueron casi 8 mil dólares! Solo de mi dinero y algunas colaboraciones”. Y agregó: “Más lo que ustedes hayan aportado! Por ende, la conclusión indudable es que hubo unificación de fandoms para apoyar a otras personas y superar los votos nuestros. Felicidades”.