A un mes de la muerte de Silvina Luna, quien tras batallar contra las secuelas de una mala praxis que le realizó Aníbal Lotocki perdió la vida, y en tanto el juicio en contra del médico avanza, fue la mujer del cirujano estético quien rompió el silencio y salió a hablar de las denuncias en contra de su esposo.
Desde la puerta de su casa ubicada en un topísimo barrio de zona norte, Majo Favarón recibió al cronista de LAM y durante la entrevista defendió a su pareja, cuestionó los testimonios de las acusadas, y habló de su rol en la clínica como secretaria manteniendo contacto con los pacientes.
“No voy a hablar de los pacientes que fallecieron porque hay un motivo por el cual fallecieron, que la Justicia tiene que determinar, y esto no fue así”, comenzó la esposa del acusado de cargar con la vida de Luna y Mariano Caprarola, entre otros.
Siguiendo con su descargo y apuntando al caso de Silvina, Majo agregó: “De hecho en la causa Luna, el informe decía que murió de una sepsis, una septicemia, con lo cual Aníbal fue juzgado por Silvina Luna, Pamela Sosa, Gabriela Trenchi y Stefanía Xipolitakis porque ellas decían que les habían puesto un veneno”.
EL TESTIMONIO DE LA MUJER DE LOTOCKI QUE CUESTIONA LAS DENUNCIAS
“Se hicieron los seis meses de juicio y se determinó que el producto no era un veneno, sino un producto debidamente aprobado. Eso no tiene que ver con el causal de muerte. El juez también fue muy claro respecto de eso”, continuó Favarón argumentando que no fue el metacrilato lo que enfermó a los pacientes.
Y en cuanto a los productos que Lotocki le colocaba a sus clientas, Majo, quien también trabajaba en la clínica manifestó: “Que yo tenga entendido, no fue un producto rebajado, y de hecho en el juicio, la única paciente que se dejó y se hizo la biopsia durante el proceso y el debate oral fue Xipolitakis y el producto encontrado que extrajeron de la biopsia era polimetilmetacrilato”.
“Las otras chicas se negaron a hacerse le biopsia en el proceso judicial, no sé por qué motivo”, remató Favarón plantando la posibilidad de que se negaran para esconder otra cosa.