La trama del divorcio de Shakira y Gerard Piqué desató una gama infinita de ramificaciones, de toda índole, desde las infidelidades, los investigadores privados, la pelea económica, la disputa por la custodia de los hijos. Pero el punto más álgido llegó con la canción de la colombiana, donde “denuncia” todo su dolor.
Esa sesión con Bizarrap encendió las llamas de un infierno mediático, con una repercusión mundial inusitada, que ya se sumergió en la cultura de decenas de poblaciones con esa frase mítica que adoptaron muchas féminas: “Las mujeres ya no lloran, facturan”.
En todo ese tsunami la ligó también Clara Chía Martí, la joven de 23 años que habría iniciado su romance con Piqué en plena vigencia de la pareja constituida de Shakira. Esta hija de acaudalados se ubicó en el centro de las críticas también y eso le habría generado problemas de salud.
A partir de lo que informaron medios españoles, la novia de Gerard fue internada de urgencia en un nosocomio de Barcelona como producto de un ataque de ansiedad, que se habría activado por el acoso que experimentó en las redes sociales.
El comunicador ibérico Saúl Ortiz describió el origen de todo este trauma de salud de Clara y especificó: “No es fácil ser una chica de 23 años y estar en boca no solo de España, sino de todo el mundo. Esto le pasó factura”. Además añadió: “Su estado anímico no es bueno”.
Más allá de los datos que surgieron hasta el momento, que infieren a una atención en el hospital Quirón de esa ciudad catalana, todavía no se difundieron más actualizaciones sobre el estado de Martí.