Benjamín Vicuña fue sorprendido por la vida, que le regaló una exitosa carrera de actor, llena de propuestas, desafíos y excelentes retribuciones por su trabajo. Pero hay algo que Benja siempre supo desde chico: quería ser papá de muchos hijos.
Y así fue que el chileno se embarcó no una ni dos sino seis veces en la aventura de la paternidad. Su auténtica vocación, tal como lo contó en el programa Mamás Felices, del canal UCL, donde habló de lo que significan para él Blanca, Bautista, Benicio, Beltrán, Magnolia y Amancio.
“Los padres hacemos lo que podemos con todas las herramientas y el amor del mundo”, arrancó Vicuña, y agregó: “En mi caso soy actor, chileno y vivo en Argentina por mis hijos. Mi trabajo requiere viajar y ahí empieza una lógica súper demandante porque están tus deseos y el querer ser buen padre”.
“Nadie te enseña a ser padre: hay mucho de instinto, pero es un recorrido hermoso. Uno siempre intenta superarse en tiempos de dedicación, calidad y en lo que uno puede transmitir a través de valores”, dijo además.
“Ahora tengo un hijo de trece años que está entrando a la adolescencia y es todo un mundo. Después tengo uno de un año y medio (Amancio) y es curioso”, contó. Luego, el ex de Pampita y la China Suárez reconoció que a los 20 años ya daba notas diciendo que quería tener “cinco o seis hijos”.
Sin embargo, Benjamín sabe que sus chicos quizás no compartan su mismo deseo, ya que ya se los preguntó. Así lo contó: “El domingo estaba con mis hijos y le pregunté a cada uno cuántos hijos querían tener. Fijate el tema raro que puse en la mesa…”.
“Me miraron. Uno dijo que uno, otro dijo que dos y otro que ninguno, porque es un quilombo. Yo creo que tiene que ver con que los niños pueden tener sus propias elecciones”, explicó, al detallar las distintas reacciones.
“Yo siempre soñé con una familia numerosa y para mí es el regalo más lindo de mi vida. Acá no hay una bajada y yo respeto a las personas que no quieren ser padres o las parejas que quieren tener un solo hijo. Siempre trato de reforzar que no hay una sola forma de amar”, concluyó.
